Capítulo 1

658 72 26
                                    

—Chifuyu me prende un montón.

Había confesado ante Mitsuya, Hakkai y Draken. Y vaya, es que eran los únicos tres a los que podía considerar sus amigos desde que había salido de la cárcel.

A Chifuyu también.

Pero si por él fuese, se lo follaría. No quería conformarse con su amistad.

Kazutora andaba ya pasado de copas. Sus mejillas estaban rojas y arrastraba las palabras pero los chicos sabían que lo que decía no eran incoherencias. Le traía ganas a Chifuyu, eso era obvio.

—Vives con él, pues. Dátelo.

—Para ti es fácil Hakkai, tu te coges a Mitsuya... Ustedes se aman. —Expresó enfatizando la envidia que sentía ante la relación de ambos.

No conocía a Hakkai desde hace mucho tiempo pero había resultado un chico agradable y se ganó su confianza de manera inmediata.

Draken sonrió ante el sonrojo de sus amigos. No había nada de qué avergonzarse, prácticamente, al reunirse, se creaba un lugar seguro para compartir tanto los chismes como las penas.

Como era habitual para ellos, se veían una vez al mes para ponerse al día con lo que ocurría en sus vidas. Normalmente iban a cenar al restaurante de los gemelos o a algún bar que fuese lo suficientemente bueno como para provocar que tuviesen ganas de ir.

Aunque debían admitir que no era fácil para todos reunirse y que, cuando Mikey asistía, Kazutora se sacaba de la manga cualquier excusa para declinar la invitación. Esta vez habían coincidido todos milagrosamente y Kazutora decidió que perderse en el alcohol sería suficiente para evitar hablar con Mikey.

Pero el alcohol suele sacar la verdad de las personas y no pudo evitar confesar lo que sentía por Chifuyu mientras lo veía al centro de la pista bailando con Emma, Hinata y Takemichi.

Mikey evitaba meterse en la conversación. Sabía que Kazutora no se estaba dirigiendo hacia él.

—Yo no creo que sea tan difícil llegarle a Chifuyu. —Mitsuya era sincero. Conocía al chico y sabía cosas de él que serían información valiosa para cualquiera que intente ligarselo.

—Joder, es que me pone... Argh. No Mitsuya, te juro que no resistiré mucho. Si vuelvo a verlo sudando mientras limpia la tienda me lo voy a tirar ahí mismo.

—Eres un asco Hanemiya... —La voz de Mitsuya expresó todo su desagrado.

—¿Y sabes qué es lo peor? Que Chifuyu tiene una cara de que es caliente... Se le nota que debe tener fetiches raros.

Todos, incluyendo a Mikey, se rieron ante la afirmación de Kazutora. Realmente el chico no sabía que lo que decía era total y completamente cierto.

—... ¿De qué se ríen? —Preguntó haciendo un puchero. Kazutora era guapo incluso en ese estado.

Mitsuya se limpió una lágrima y tomó un poco de su bebida para aclararse la garganta. No sabía que tan delicado podía ser contarle a Kazutora sobre la intimidad de Chifuyu. Después de todo, ellos lo conocían desde hace más de una década y él apenas llevaba algunos meses viviendo bajo el mismo techo que el chico.

Pero en fin, Kazutora dijo que se lo quería coger...

—¿Qué tanto sabes de la relación que hubo entre Keisuke y Chifuyu? —Preguntó Mitsuya retomando un poco de seriedad.

Para Kazutora era un tema que lo devolvía a la realidad. Pensar en ello hizo que se le bajara lo poco o mucho que había bebido y se sujetó la sien.

—Sé que fueron novios, sé que se acostaban. No había necesidad de fastidiarme con esto... —Reprochó.

Se te nota [Kazufuyu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora