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—¿En serio estás bien? —le preguntó WonWoo a Nissa por novena vez desde que habían llegado al hospital.

—Estoy bien —le respondió con una pequeña carcajada al ver el rostro preocupado del coreano —. He pasado cosas peores —quiso bromear para aligerar el ambiente sabiendo que WonWoo no había escuchado nada de la pelea con Rachel.

Pero los ojos rasgados de WonWoo la seguían mirando con preocupación y su nariz arrugada le pareció lo más tierno.

—Deberías irte a casa —cambió de tema mirando a su alrededor en caso de que alguien viera al idol ahí y comenzara a crear rumores.

—No, hasta que terminen contigo —se negó cruzando sus brazos sobre su pecho —. Hay que esperar al doctor.

Nissa suspiró al notar que los problemas que se avecinarán después de su discusión con Rachel y comenzó a imaginarse los peores escenarios en su mente.

—Tranquila —la mano de WonWoo se colocó en su pierna inquieta —, el señor Lee resolverá todo, no te preocupes por nada.

—Lo sé... —levantó su cabeza para observar los ojos de WonWoo detrás de sus cristales —, lo menos que quería era causarle problemas a Lee y fue lo primero que hice.

—Pero tú no hiciste nada —recalcó WonWoo.

—No estuviste ahí —le dijo Nissa entrecerrando sus ojos y notó como WonWoo trató de esconder su sonrisa.

—Eso es un buen punto —concordó con ella y los dos rieron.

—¿Nissa James? —escucharon la voz de un doctor y ambos se sorprendieron al ver a una persona con nulos rasgos asiáticos.

—¿Si? —preguntó Nissa asombrada por la belleza de aquel doctor.

Definitivamente era europeo por su forma de hablar, la manera en que pronunció su nombre y como sonaban las palabras que pronunciaba. Era casi igual de alto que WonWoo, pero con más masa corporal. Sus ojos azules podían hipnotizar a cualquiera que los viera y con su cabello rubio que parecía dorado abajo de la luz. Parecía un príncipe de aquellas películas animadas que volvía loca a todas por su encantador perfil.

—Soy el doctor Martín, el encargado de emergencias —se presentó tendiéndole una mano a la mexicana y Nissa la estrechó por mera cortesía —. He revisado tus radiografías y no hay señal de ruptura en la nariz. Todo está en orden —comenzó diciéndole en inglés creyendo que Nissa era una persona que manejaba el inglés como primer idioma.

¿Qué dijo? —preguntó WonWoo llamando la atención de Nissa al no entender ni una palabra que había dicho el doctor.

Todo está en orden —le dijo rápidamente al ver que el doctor seguiría hablando.

—Te mandaremos unas pastillas a casa para ayudarte con el dolor. Será necesario que coloques compresas frías sobre la nariz para disminuir la inflamación. En unos días la zona comenzará a tornarse color negro o azulado debido al proceso de un hematoma.

Nissa asintió entendiendo cada palabra que el doctor le decía, pues ella tenía esos conocimientos de medicina.

—Si presentas alguna otra alteración sería bueno que vinieras para revisarte —finalizó con una sonrisa amable, mostrando sus perfectos dientes —. ¿Tienes alguna duda?

—No, ninguna —apretó sus labios sintiendo un poco de dolor en toda el área de su nariz.

—Entonces sería todo de mi parte, puedes pasar al área de cajas —se inclinó y se despidió de manera formal.

The BeginningDonde viven las historias. Descúbrelo ahora