Tras una semana más en el puerto terminando de preparar el barco y conseguir más bienes y dinero con misiones, decidimos que ya era el momento de partir, terminamos de cargar las cosas en el barco y después de un largo y cansino trabajo, estuvimos más que preparados para viajar a través del mar de Asgard. Pero eso no era todo, tras tanto tiempo juntos, las relaciones entre nosotros fueron cambiando. Eric comenzó a mostrarse más inseguro e inquieto frente a todos, incluso conmigo, Lima parecía haber estrechado lazos con Ernesto y parecía algo distante conmigo, Ernesto seguía siendo el mismo zoquete que no se enteraba de nada de siempre y yo simplemente comencé a darle más importancia a otras cosas.
- ¿Te estás adaptando a esta nueva vida? - le pregunté a Ernesto en el único momento que lo pillé sin tener nada que hacer.
-No es fácil, echo de menos a mis padres y a mi hermana, es duro pensar que puede que no los vuelva a ver.
-En este barco tenemos todos un poco de eso, estoy algo preocupado. Solo Lima es la única que tiene un lugar a donde volver, Eric está solo... bueno, está su hermano, pero la última vez que lo vio casi muere. Yo la verdad es que ni quiero pensar en volver, solo con recordar aquella casa...
-Sé mejor que nadie por lo que has pasado, yo lo he presenciado de primera mano, recuerda.
-Y aun así sigues a mi lado, eres mi mejor regalo de cumpleaños. - le dije sonriente.
- ¿Cómo podría abandonarte? Es imposible, eres como un cachorrito, es salir por la puerta y pensar que te tienes que sentir solo sin mí.
-Creo que tienes una imagen de mi algo equivocada.
Ernesto pasó su brazo por encima de mí y me susurró al oído.
-Soy la única persona capaz de hacerte llorar.
-Y también el único con el que me gusta desahogarme, no olvides que yo a ti también te he visto llorar... por chicas. - dije tumbándome en el suelo.
Ernesto se sentó a mi lado y puso mi cabeza sobre su regazo.
-El pasado ya no tiene importancia, ahora creo que te tengo que ayudar yo antes de que te vea llorar por alguien. - dijo poniendo tono serio.
- ¿De qué hablas?
-De Eric Roy, de Eric.
-Pensaba que no te habías dado cuenta.
-Hay cosas que no entiendo hermano ¿Estás saliendo con él?
-No estoy seguro. - dije suspirando.
-Pero algo está claro y es que tú a él lo quieres, se repite la historia de N...
-No lo digas, ya dijimos que no hablaríamos nunca más de esa persona.
-Vale, pero Eric parece algo alterado, parece que estés detrás de un lobo puro, no me extrañaría, llevas toda tu vida agarrando animales callejeros y cuidándolos en secreto ¿Recuerdas que cuando entrabas al instituto todos los gatos venían corriendo a por ti?
-Ayudé a nacer a todos y cada uno de los gatos del instituto, por eso ya no dejan a los alumnos pasar al jardín de los maestros. - dije riendo.
-Bueno pues parece que has encontrado a tu nuevo animal, uno más peligroso que no deja de gruñir y mirar ferozmente.
-Eso lo dices porque no lo viste el primer día, si tu hubieses visto la cara que puso cuando Atenea casi lo mata, te hubieses enamorado también, o como se tumbaba a mi lado sin tan siquiera me conocía, o cuando me pide que le ponga la camiseta porque no sabe usar sus brazos del todo, es precioso tío.
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Desterrados: Los misterios de Asgard
Ficción GeneralTras su viaje por tierra desde Neo Asgard, Roy cambia su medio se transporte y se enbarca en una nueva aventura por el mar ¿Llegará a Yggdrasil?