Los viejos recuerdos que tengo con luisa no dejan de abrumarme la mente. Desde el momento que llegue a Sensations hasta el cómo termine siendo salvada por Eder Ross. Tenía miedo de encontrarme con Enzo; en el momento que desperté del coma viví con ese temor a que me reconociera y me atrapara de nuevo por su estúpida obsesión. Ahora que soy más segura de mi misma estoy dispuesta a enfrentarlo. El solo imaginar el maltrato forzado que les da a mis amigas solo por complacer a una jauría de personas hambrientas de sexo, me hace sentir eufórica.
Cumplió con su promesa de llevar a Sensations a Italia.
Hace más de cinco días estoy desesperada por regresar de nuevo y confirmar que es Luisa la que está en Seduzione. Quiero ir por ella, salvarla y saber por su propia boca que fue lo que pasó hace más de cuatro años.
Desde que nos fuimos de Seduzione he estado alterada, no he dormido bien, la comida no me pasa y es forzada lo que como debido a la insistencia de Alek.
Dos días después le platiqué al rubio sobre mi amiga, no le di explicaciones del pasado, cosas que no quiero recordar, pero siguen presentes. Alek entendió mi desesperación y le explico un poco a Lara, aunque la pelinegra hizo malos comentarios como: nos desviaremos del objetivo. Aun así, Alek dio la orden de ir en busca de Luisa, acercarnos a ella y sacar información.
En mi mente está el cómo sacarla de ahí y traerla conmigo.
A la mitad de la madrugada salgo de mi habitación y bajo por un vaso con agua a la cocina. Al abrir el refrigerador agarro unos hielos para refrescarme. Al terminar de beber dejo el vaso de cristal sobre el fregadero y al dar la vuelta para subir de nuevo a mi habitación y trata de dormir, me encuentro al rubio de pie recargado en la entrada observándome.
—Pensé que venias a comer.
Niego con la cabeza.
—Viene por agua a refrescarme. Lo necesitaba.
A pasos sigilosos Alek se acerca a mi e indica que me siente en una de las sillas del comedor, para después, el hacer lo mismo.
—Aina, debes de controlar tu ansiedad. No puedes dejar de comer y no dormir, no te hace bien.
—Lo sé, pero no puedo parar. El imaginar a mi amiga ahí...no puedo.
—Tienes que ser más fuerte de lo que eres. Entiendo que esto sea nuevo para ti, te criaste fuera de la mafia, pero ahora estas dentro y tienes que soportar.
—Trato de ser fuerte...
—Sé que eres fuerte, si no lo fueras no estuvieras aquí soportando la carga de portar la corona de la reina de la mafia rusa. Para llegar a ella el proceso es desgastante.
—Eso es a lo que le temo —le interrumpo —. No me imagino el mañana. Si ahora estoy con ansiedad, más adelante terminaré loca.
El rubio comprende lo que le digo.
—Trato de ser fuerte, pero no lo soy. Soy tan cobarde.
—No lo eres. Deja de pensar en eso y mejor enfócate en cómo llegar a Luisa.
Sus palabras son frías, pero ciertas.
—No vas a lograr nada lamentado si eres fuerte o no. Lo eres, fin de la conversación... Si no puedes dormir sube a tu habitación y piensa en un plan que regresaremos el viernes a Seduzione.
Su compartimiento cambio drásticamente. Dejó de ser comprensivo conmigo, y comprendo, el ser tan pasivo conmigo no me ayuda en nada.
Durante mis entrenamientos Alek me ayudaba en mis caídas, pero los hombres de Abdel me gritaban, me trataban como si fuera una basura, pero gracias a ellos pude y pase todas las pruebas. Soy más fuerte de lo que llegué a pensar.
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Falsa Identidad: Amores que hieren (2do libro)
Genel KurguLa comprensión es el primer paso para la aceptación y sólo aceptando se puede recuperarse. Yo he aceptado mi pasado, soy consciente de lo que fui y lo qué sucedió a pesar del doloroso y fatal destino que pasé. La vida me dio otra oportunidad para am...