Cap 1

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Ay Corea del Sur ¿quien no ama a este país?, Todo el mundo lo ama no hay nadie en este mundo que no haya pensado en visitarlo.

En ese país existía una familia, la familia más grande y poderosa de todos los tiempos, la familia Lee. Una familia que lo tiene absolutamente todo.

Pero desafortunadamente el padre, Jo-Suk había ido a la cárcel por un insidente de un intento de asesinato qué se le encontró

En esos 2 años y medio los hijos alfas del señor Jo-Suk, Ji-hyun y Cho-an se hicieron cargo de la empresa dejando a un lado a su pequeño hermano omega, Félix

— oh permiso - dijo Félix mientras corría, el no era como sus hermanos, no el era totalmente diferente.

Era independiente en todo aspecto y no necesitaba de la empresa de su padre ya que el había puesto su propia empresa

— compermiso señora Yang - sus hermanos lo odiaban ya que sabían que la empresa era para el.

Por eso querían que desapareciera de la fas de la tierra. Querían que simplemente lo tratara la tierra sin importar que o que le pasara

— llegue - pronunció Félix llegando a la empresa familiar - que cansado

— ¿qué haces aquí? - dijo - que no te dijimos que no te queríamos cerca de aquí

— bueno - dijo Félix - papá salió hoy así que yo quise-

— ¿venir a verlo? - dijo mientras lo interrumpía - pff por favor Félix - lo avienta - no seas iluso. Un Omega idiota como tu no logra nada

— como vez que yo he logrado más cosas sin la empresa de mi padre - pronunció Félix enojado - no seas tú idiota, Cho-an tu solo vives bajo la barba de mi padre - rio -

— como te atreves - levanta su mano para golpear a Félix -

— CHO-AN - grito un señor mirando con desprecio a su hijo  - deja a tu hermano - el señor Jo-Suk odiaba que sus hijos se comportaran mal con su único hijo omega.

— pero padre

— cállate idiota - dijo Félix - padre - le hace una reverencia - yo solo vine a ver cómo estaba y ahora ya me voy - camina hacia la puerta -

— no, Félix, espera

— se voltea - ¿que sucede padre? ¿Le ayudó a algo? - preguntó Félix -

— se acerca a él - yo quiero que tú seas dueño de toda mi empresa y que firmes un contrato para cuando yo me retire

— padre en estos momento no tengo tiempo - dijo mirando su reloj - ¿te parece mañana?

— bien, mañana lo firmas

— eso haré padre - sonrío - ahora si me disculpas debo irme

Dijo para después salir del edificio e ir directo a su empresa para grabar un comercial sin saber lo que le pasaría en unas horas

Y nadie podía remediar lo que estaba apunto de pasar

aterrizaje de emergencia en tu corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora