XI

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⚠️ MENCIÓN DE ABUSO EXPLÍCITO

—Rhaenyra Targaryen se ha ido de la mansión Targaryen — Susurraron al oído de Otto. Otto Higtower sonrió victorioso imaginando la fortuna que haría ahora con la tutela completa de esos niños.

<<Algo bueno me dejaste hija>>

Ocho días tardó Otto en llegar a la mansión donde los niños yacían esperándolo con los ojos oscuros y tristes.

Todos se han ido — Daeron lloró solo en su habitación, por primera vez; siempre acudía a sus hermanos pero a partir de ahora todo será diferente

— ¿Somos tan desagradables, mamá? — Helaena hablaba perdida, su boca temblaba al igual que su cuerpo al recordar todas las veces que han Sido abandonados

— Dame otra botella — Aegon por supuesto como el rebelde que siempre ha sido robo las llaves de la cantina y el solo hacia el papel del cantinero y del borracho — Claro, señor; ¿Cómo va el trabajo?— esa es la única forma que encontró para olvidarse de todo

—...Valar morghulis— Aemond por su parte se refugió en la biblioteca donde leía todo tipo de libros y encontraba nuevas palabras

Otto entro a la casa y al no ver a sus nietos esperándolo se enojo demasiado.

— ¿Dónde están? — interrogó a una criada

— No lo sé, jugando, tal vez — la señora estaba asustada, ella no cuidaba a los niños pues estos mismos le pidieron que no lo hiciera a menos de que ellos lo pidieran

— Traelos — al ver el rechazo de la sirvienta le gritó — ¡Rápido, mujer!

En media hora los niños y la niña ya estaban en la sala parados con la espalda recta y mirando el suelo, Aegon estaba muy alcoholizado.

— ¿Por qué estás borracho Aegon?

— Ya estoy grande, puedo emborracharme — balbuceó con los ojos perdidos

— Grande Já— resopló cruzándose de brazos— Dices ser grande pero apuesto que sigues siendo una virgen puritana como tu madre a tu edad

— Eso que le importa, viejo asqueroso — escupió el insulto causando que las venas de la frente del anciano se remarcaran

Otto no soportó mucho y le dió un puñetazo que lo mando a volar hasta el suelo. Otto no es más fuerte que Daemon o Criston, pero si más fuerte que Aegon que es solo un niño de 11 años.

Aegon no pudo evitar llorar a gritos histéricos obteniendo como respuesta patadas en el estómago.

— ¡Cállate! — patada — Un hombre no llora, ¿Me escuchaste? — lo jaló del cabello con demasiada fuerza y lo soltó con brusquedad al ver el asentimiento del ojivioleta

El resto de los niños veían lo sucedido con los ojos abiertos y las manos temblando del miedo. Helaena se hizo la desentendida musitando la canción de cuna que su mamá le cantaba para que se calmara.
Daeron apretó con fuerza a su peluche tessa rezando como mamá le enseño. Aemond quería quitar de encima a ese anciano de su hermano, ¿Cómo se atreve a tocarlo? Solo él puede hacerlo.

Una vez que la paliza finalizó Otto sacó un pañuelo y limpio la sangre de su mano; le aventó el pañuelo a Helaena "limpia mi zapato" le ordenó.

— Yo-yo-

— Tú, tú, rápido mocosa no tengo todo tu tiempo — la jaló del brazo para tirarla al piso

— Yo lo hago — Aemond se metió y empujó a Helaena para ponerse adelante de ella.

Sex,Drugs And IssuesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora