Día 05.

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Abrí los ojos, todavía tenía la vista completamente borrosa, el ceño se me frunce ya que me siento el cuerpo completamente cansado. Es ese cansancio o esa sensación de no poder moverse en las mañanas... O es por las duras embestidas que Rei me dio ¡Cielos! Y yo que quería que él fuese el que llevase todo eso ¡Voy a tenerlo abajo un día! No será hoy, ni mañana, ni en unos años ¡Pero de que estaré arriba, lo haré! Quiero hacerlo gritar, quiero hacérselo como él me lo hace a mí. Quiero decirle que lo amo en medio del placer, quiero poder ser más alto que él, más alto, más dominante. Quiero... Tantas cosas quiero de mi Rei.

Todo menos ser el uke.

Dejo de tener esos pensamientos vergonzosos ¿Por qué pienso tanto este tipo de cosas? Como sea... Veo sus grises cabellos envolviendo su rostro, ¡Ese dormilón! No tiene remedio pero ¿Qué le queda? Al verlo toda pesadez se disolvió de mi rostro, todo mal humor mañanero desapareció. Todo gracias a Masato Rei, al dormilón, alto, gay... Pero no cualquier gay ¡Es mi gay! Basta. Estos pensamientos están comenzando a molestarme.

Continuo mirándolo, labios rosados, muy blanco, un cuello tan largo que quisiera recorrer. No evité tocar su cabello, era tan lacio, tan suave, me maravillé con la perfección que mi tacto estaba recorriendo. Luego de ello, decidí levantarme dejando a Rei durmiendo. No quería despertar, si seguía tocando no pararía. Rei es lo mejor que alguien puede tocar, la mayor ventaja es que sólo yo puedo tocarlo.

Nadie más.

Me encerré en la ducha mientras aclaraba mis pensamientos ¿Estas cosas son las que pasa por mi mente cuando me levanto? Imposible. Yo soy un chico sano de 16 años que apenas está en su último año de secundaria ¡No debería pensar tantas cosas sucias con un chico! Ni cosas sucias ni románticas, lo que debería hacer es alejarme, ya que una relación entre dos hombres no es muy... Sana.

            Pero no quiero alejarme, más bien quiero aferrarme a sus brazos para siempre, que estemos juntos para siempre ¿Esto se siente al estar enamorado? Pues... Tengo que aceptarlo. Me enamoré de un hombre... La persona con la que quiero compartir mi vida sexual, mis triunfos, mis fracasos, y la persona con la que quiero envejecer es... Un hombre. Tal como yo, los dos nos amamos. Los dos somos hombres. Eso no está bien, pero... ¿Por qué está mal? Si este sentimiento no mira edad, ni sexo. Es el mismo amor intenso y hermoso. Es el mismo precioso sentimiento. No renunciaré a ello sólo porque seamos dos hombres...

            Ahora si lo pienso, el campamento dura 7 días. Vamos en el quinto, ya se va a terminar... Estoy preocupado por eso, ¿Dónde vivirá Kou? ¿?

            Mientras enjabonaba mi cuerpo cantaba Romeo and Cinderella de Miku. O tarareaba el ritmo ¡Qué cosa tan difícil es aprenderse esas canciones! Pero sentía cierta identificación con algunas partes de la letra.

No dejes que nuestro amor se convierta en la tragedia de Julieta. Quiero escapar de aquí contigo. Hoy deseo junto a ti estar.

En dos días, posiblemente no volvamos a verano, quizá nos toque perdernos, pero no quiero. Quiero escapar con Rei... Pero, ¿Quién sería Romeo y quién sería Cenicienta? Me enrojecí al pensar... Que la cenicienta soy yo ¡Qué vergonzoso!

Lo único que puedo admitir con claridad, es que no quiero alejarme de Rei. Quiero aferrarme a él lo más posible, pero hay tantas cosas que no sé de él, dónde vive, de su familia, de su vida, sus talentos, sus defectos, no sé nada de nada acerca de Masato Rei. Estaba enamorado de alguien que no conocía... Como tal. Lo peor es que es un hombre. Esto pesa tanto para mí.

Salgo de la ducha, me visto colocándome una camisa azul con rayas, con unos shorts cortos. Salgo del baño para encontrarme con Masato Rei... Vestido, comiendo, despeinado todavía...

7721 (GAY)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora