Barras y Estrellas

Capitulo 17

España corría bajando las escaleras, las lágrimas se acumulaban en sus ojos y aunque no luchaba para retenerlas rápidamente sus ojos volvían a empañarse "¿por qué?¿por qué?¡¿POR QUÉ?!" Su mente era un caos, no paraba de gritarse a si mismo una pregunta intentando haya la respuesta, pero no encontraba ninguna.

"¿Por qué has hecho eso? ¿Por qué no me lo dijiste? Si para ti era un amigo debería habérmelo dicho antes... ¿Qué cojones era en tú vida? No fui tu amigo, pero esta claro que tampoco fui un amante no me quisiste para nada" 

España baja las escaleras lo más rápido que podía, necesitaba correr, sentir que huía pero no sabía muy bien de que ¿del alemán? ¿de sus sentimientos?¿del americano?. España se tropezó con su mismo pie y rodo un par de escalones hasta chocar en el suelo, rápidamente se puso de pie intentando disimular el dolor que sentía ahora por todo el cuerpo.

"Esto es un asco"

Cojeando llego al final de las escaleras donde lo esperaba una puerta, abriéndola de golpe salió a la entrada principal del edificio, el español siguió caminando como podía intentando salir de ahí. Empujaba  a la gente y esta se giraba mirándolo mal pero no decían nada, cuando se giraba para insultarlo veían a un hombre patético, cojeando con rostro mojado en lágrimas y despeinado, le daban tanta pena que simplemente ignoraban el haberlo visto.

España alzaba todo lo que podía su cabeza para buscar las grandes puertas y salir de ahí, antes del que dolor en su cuerpo le impidiera moverse, sin duda se había hecho mucho daño cuando cayó por las escaleras, pero el dolor en su corazón le impedía sentir el físico. Cuando por fin las encontró camino tan rápido como pudo a la salida le faltaban solo unos pasos más, podía sentir el aire frío y húmedo en su cuerpo, necesitaba envolverse en ese frío, que lo embalsamara en él como un paño frío en una lesión, un relajante al cuerpo, algo que lo adormeciera y tranquilizara por completo.

España estaba cerca cuatro o cinco pasos más y todo acabaría, estaría afuera de ese asqueroso edificio, fuera de la vida de esos tres country, fuera... solo... solo fuera. Tres pasos...dos pasos... el frío picaporte en su mano y un simple tirón... un tirón que él recibió.

USA: The garage is not there. (El garaje no está por ahí.)

España vio como de repente la puerta se escaba de sus manos, como todo lo que había avanzado retrocedía al punto de partida, como el frío de la noche se había vuelto un cálido cuerpo que le abrazaba desde atrás para que no avanzara, el frío aire que le acariciaba el rostro segundos atrás era ahora un cálido aliento en su cuello pero sus lágrimas aún no paraban y el dolor en su cuerpo seguía presente.

España: Suéltame...- suplico apenas audible- Tengo que salir

USA: No (No)- murmuro colocando su rostro en su cuello.

España: Por favor... por favor... déjame ir...

USA: No (No)

España cerro los ojos y aún así las lágrimas se escapaban sin parar intentaba regular su respiración todo lo que podía pero con solo sentir el cálido aliento y el cuerpo varonil que desde atrás lo abrazaba hacia que unas ganas de vomitar inmensa se apoderarán de él.

España: ¡SUÉLTAME!- Grito mientras empezaba removerse- ¡ TE DIGO QUE ME SUELTES! ¡SUÉLTAME! 

USA apretó más el cuerpo del hispano contra su cuerpo con la esperanza de que se quedará quieto.

USA: I won't let go you hear me... so hold still, you're putting on a show (No te voy a soltar me oyes... así que estate quieto, estás haciendo un espectáculo)- gruño en la oreja del ibérico.