(Canción sugerida)
-Primer día de Kaveh-
El sol irrumpió en la ventana vidriada de mosaico colores verdosos que simulaban cristales reales muy comunes de la cultura Sumeru, el joven Kaveh abrió los ojos de un solo parpadeo, como si hubiese dormido alerta solo para despertar al alba para ese día tan importante, se vistió con el ropaje característico de cada estudiante que debía pasar por al menos una década de preparación antes de escoger una facultad en la cual especializarse (Y solo es el comienzo porque después debe hacer su tesis y seguir estudiando), era una decision que influía particularmente en esa comunidad pero para Kaveh aun era un objetivo mas que distante ya que estaba recién integrándose, pensaba en todo aquello mientras acomodaba su uniforme y salía con un maletín que disonaba entre lo que se utilizaba comúnmente en las escuelas pero para el no había algo mas importante que un utensilio que fuese tanto practico como armónico a la vista, o al menos eso pensó el, puesto que al llegar al gran palacio ubicado cerca del centro de la ciudad un par de "nuevos compañeros" lo arribaron, el par estaba compuesto por un chico bajo y gordo con grandes mejillas enrojecidas que era acompañado por un chico mas alto y delgado que tenia una gran nariz en medio de su rostro, como si fuesen un par burlesco de una comedia escolar.
Chico bajo: Miren, parece que llego un hombrecillo de negocios
Chico alto: ¿Que harás con ese maletín? ¿Estafarnos?
Chico bajo: Hm.... No tiene pinta de ser lo suficientemente inteligentes como para vernos la cara, apuesto a que solo es un pretencioso
Chico alto: Uy si, venir asi en tu primer día, apuesto a que no te dan atención en casa.
Las palabras de los chicos podrian afectarle, picaban levemente su tranquilidad y emoción, pero Kaveh solo les dio una sonrisa, no dejaría que un par de insulsos le arruinaran su día, su actitud confundió al par quienes no pudieron soportar el echo de perder ante un chico nuevo por lo que tomarían a Kaveh del cuello de su traje para propinarle una "primera lección" levantando su puño amenazando con golpear su rostro, sin embargo uno de los maestros que pasaba les habló desde lejos para detener la pelea y al mismo tiempo llamar al joven Kaveh para que fuese guiado hasta su respectivo salón de clases y el chico fue gustoso con quien parecía ser una de las coordinadoras de la academia ya que su traje si bien era similar a los maestros tenia un par de decorados mas minuciosos.
Coordinadora: ¿No dejes que esos niños se burlen o te maltraten si?
Kaveh le miro con una sonrisa como si todo estuviese bien y siguieron su camino hasta el salón que se encontraba perfectamente ordenado con mesas amplias con inclinación hacia los estudiantes para brindar comodidad al escribir, igualmente tenia espacios nivelados para estuches y frascos de tinta, todo en Sumeru esta pensado para un buen rendimiento académico, el profesor de la clase dictada se encontraba en frente cuando fue sutilmente interrumpido en una pausa por la coordinadora entro junto a Kaveh quien no perdió la oportunidad de dejar una "primera buena impresión" en sus compañeros.
Coordinadora: Clase, les presento a su nuevo compañero Kaveh, a ingresado a mitad de semestre por motivos personales así que démosle un buen recibimiento.
Los ojos se posaban sobre Kaveh, lo cual podría intimidar a cualquiera pero este solo sostuvo su maletín a un lado discreto y levantó ligeramente su mano a la altura de su rostro para saludar silenciosamente pero con una sonrisa que gano la simpatía de mas de uno; el profesor de clase le designo el único puesto que quedaba libre en uno de los puestos del centro pero detrás lo cual no le gustaba mucho ya que prefería estar en frente para tener una mejor atención, de todas formas daría lo mejor de si por lo que camino entre los puestos y mientras recibía las miradas mezcladas entre curiosidad, agrado, indiferencia y prejuicio hasta que tomo asiento junto a un chico de cabello negro por un lado y por el otro un chico de cabello gris que no había despegado la mirada de su libro desde que habían llegado lo cual le dio la sensación a Kaveh de que ni siquiera había dejado de leerlo durante la ultima hora o día puesto que se veía bastante sumergido en la lectura, finalmente se inclino levemente para dejar su maletín sobre la mesa para sacar un cuaderno hecho a mano, la cubierta era dura envuelta en hojas bañadas en una mezcla de cera que le otorgaba brillo pero también soporte, en el centro tenia un pequeño espacio abierto delineado con pequeños detalles para dejar apartada la materia que iba a contener el libro, las hojas se encontraban tejidas prolijamente a mano y en un apartado tenia una pequeña pero larga hoja que funcionaba como marca páginas, en eso casi podia sentir la mirada del chico de cabello gris sobre el, lo cual le dio un poco de incomodidad al tener una mirada tan fria, no se imaginaba que clase de chico seria pero sin duda se sintió intimidado por ello a lo cual intentaría evitar conflictos especialmente con el ya que ya había tenido un primer encuentro con otros dos en la entrada.
La clase continuó como si nada mientras el joven de ojos rojos se ponía al corriente como podía, acomodaba su brazo izquierdo sobre su libro para anotar apuntes no muy completos ya que pediría el resto de libros con el mismo maestro, para cuando la clase llego a su fin, la mayoría de estudiantes y el mismo profesor abandonaron el salon bañado de tonos verdes/dorado, el chico dio un exasperado suspiro al no poder comprender mucho sobre la teoría de aquella materia ya que se le venia muy bien las matemática y los cálculos hasta que saco su horario de clases solo para notar que la siguiente clase correspondía a combate y manejo de armas lo cual no le agrado mucho y eso se podia notar en su rostro, era demasiado expresivo y cualquier pensaría que estaba comiendo algo de lo mas amargo del mundo; hablando de seres amargos el peli gris a su lado no pudo aguantar lanzar un comentario al verle de reojo mientras leía.
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Esmeralda y Rubí: Una historia de Sumeru (Kaveh x Al-Haitham)
FanfictionA la academia había llegado un chico nuevo que destacó por sus intensos ojos que salían de cualquier norma "común", un chico siempre sonriente y dispuesto a levantar la mirada cada mañana para enfrentar un nuevo día, Kaveh había ingresado tardíament...