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Narrado por Lili📍

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Narrado por Lili📍

¿Qué había pasado?

¿Cómo había pasado?

¿Porqué había pasado?

Eran las preguntas que me hacía en ese momento, mientras estaba sentada en el frio suelo del hospital, abrazando mis rodillas, con la cara enterrada en estas, llorando a mares y pidiendo despertar de esta pesadilla que vivía, con el corazón malherido en las manos.

Se sentía tan irreal.

Como si fuera una broma.

Como si realmente él no hubiera sufrido aquel tan impactante accidente.

Como si no fuera él quien luchaba por su vida en aquel hospital.

Realmente en ese momento no asimilaba la noticia o más bien no quería hacerlo, no quería aceptar la realidad de las cosas.

No quería aceptar lo que vivía.

No podía.

Me sentía vacía, sola, triste, rota, enojada. Tenía tantos sentimientos encontrados, tantas cosas en la cabeza, sentía el que aire me faltaba, me dolía el pecho, sentía frío, sentía dolor.

Era horrible.

Era asfixiante.

Era impactante.

Aún podía oír en mi cabeza las palabras de mi madre, cuando recibió la llamada del hospital, cuando le dijeron que necesitaba ayuda ya que había heridos gracias a un accidente automovilístico, ella rápidamente fue al hospital, me llamó y me soltó aquella noticia que me rompió.

Roier era uno de los heridos, estaba inconsciente, muy lastimado, su pulso era bajo, perdía sangre segundo tras segundo.

Sentí como el mundo se me vino abajo.

Sentía como una parte de mi se desprendía de mi cuerpo.

Mi celular cayó al suelo y con el yo también, mis rodillas golpearon contra la cerámica, mis ojos se llenaron de lágrimas, y mi garganta ardió cuando su nombre salió de mis labios en un grito en donde el dolor y la desesperación se notó. Montserrat me tomó de los brazos y me preguntó que pasaba, no podía articular otra palabra que no fuera el nombre de mi novio, mi hermana me envolvió en sus brazos y me aferre a ella, intentando buscar calor, pero no lo sentía.

No sentía el calor que deseaba sentir.

Aún me sigo preguntando como es que logré conducir hasta el hospital.

Si prácticamente cuando pise aquel suelo, mis piernas flaquearon, caí otra vez, llore otra vez, y grite su nombre nuevamente.

Mi madre me auxilio, me abrazó, intento consolarme, pero no lo logró, nadie podía consolarme, nisiquiera yo misma, nisiquiera sus brazos.

𝐅𝐑𝐈𝐄𝐍𝐃𝐒 𝐓𝐎 𝐋𝐎𝐕𝐄𝐑𝐒 ── 𝐑𝐎𝐈𝐄𝐑 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora