Retrato del pasado

Capítulo 7

Un mes después:
Hoy era mi último día en casa de Marta, hoy me incorporaba a clases y vería a
los chicos, no se porque pero en este tiempo me han tenido abandonada, no se
que les pasaba conmigo.
Estaba esperando a Nerea que pasaría por mi. En este tiempo ella había estado a
mi lado todos los días, ella me cantaba y me animaba, me había dicho que iba a
estar siempre conmigo.
Estaba pensando en ella cuando apareció en la habitación, terminé de recoger mis
cosas y nos fuimos a clases, metimos mis maletas y las suyas en el coche, desde hoy se venía conmigo y la verdad eso me tenía feliz, me hacía bien tenerla cerca.
Llegamos al instituto y no se escuchaba nada en clase y eso que íbamos quince
minutos tarde.
Llamamos a la puerta y no contestaron, que raro.
Marta dijo de entrar, aunque no se para que si no había nadie, entramos y estaban
todos allí, me habían organizado una bienvenida, me abrace a todos, la verdad
son los mejores, en ese momento sonó el móvil de todos ya sabíamos que era,
una nueva foto. Sólo me fijé que ponía "no cantes victoria".
Había estado pensando a quién le había hecho tanto daño para que me haga algo
así, no que cuelgue fotos mías insultándome si no que haya intentado matarme.
Alguien me saco de mis pensamientos

-Juanma: ¿qué vas a hacer?
-Cata: seguir adelante.
-Juanma: no debes dejarlo así.
-Cata: lo sé, pero sólo quiero olvidarlo.
-Todos: ¿olvidarlo?

Preferí no contestar, no me gustaba mentirle a los chicos, sabía que jamás
olvidaría esto que estoy viviendo.

-Cata: mientras no pase de insultos, la verdad no duele el insulto sino quien te lo
dice y yo no sé quién es y por eso me da igual, se como soy y lo que soy y quien
me conoce sabe que eso no es verdad. Nadie tiene derecho a juzgar a nadie.
-Nerea Cantante: eres demasiado inocente.

Le dediqué una sonrisa, sabía que podía contar con ellos y que me querían.
Estaba distraída mirando por la ventana cuando me llegó un mensaje de
facebook.
Desconocido: alejate de ellos o pagarán tus culpas.
¿y si les pasaba algo? ¿ ya lo habían intentado en el río?

-Reyes: ¿Qué piensas?
-Cata: nada importante.
-Reyes: tienes la mirada triste.
-Cata: no se que está pasando, te lo juro.

Ella me abrazó, sentía tanta soledad y tanta tristeza, estaba rodeada de personas a
las que le importó pero me sentía tan sola, desprotegida.
Me acerqué a Manu y su novia Nerea, después de hablar un rato con ellos, ella
salió para ir al baño, treinta minutos después aún no había aparecido, fuimos
Marta y yo ha buscarla al baño.
Entramos y estaba tirada en el suelo, golpeada y llena de sangre ¿Qué había
pasado?
Marta fue a por ayuda mientras yo intentaba que reaccionara, estaba muy
asustada, estaba recobrando el conocimiento cuándo todos entraron.
Manu se puso a su lado y Juanma me aparto para ayudarle a levantarla.
Ella me miró, vi rencor en su mirada.

-Nerea: fue su culpa (dijo señalándome).
-Juanma: ¿Qué pasó Nerea?

Me mandaron un vídeo por privado en facebook, era alguien golpeando a Nerea
y diciéndole que se alejarán todos de mí o acabarían peor que yo.
Me salí del baño, me fui hacía mi coche para ir a mi casa.

-Claudia: ¿dónde vas?
-Cata: vete.
-Claudia: no te vas a ir y menos sola.
-
En eso llegó Marta con Ismael.

-Cata: ¿no ves lo que pasó por mi culpa?
-Ismael: no fue tu culpa, ella está nerviosa y tiene miedo.
-Cata: es normal, le han dado una paliza por mi maldita culpa.
-
Ismael me abrazó y me dijo cosas al oído para tranquilizarme. Él es quién más
me conoce, desde que nos conocimos el año pasado tenemos una conexión
especial, nos contábamos las cosas y nos apoyábamos el uno al otro siempre.

-Manu: perdona a Nerea esta muy nerviosa y asustada.
-Cata: la entiendo y lo siento. Creo que lo mejor es que os alejéis todos de mi.
-Todos: ¿qué?
-Cata: es lo mejor, no quiero que os hagan daño.
-Ismael: y yo no quiero que te lo hagan a ti.
-Cata: tranquilo, no pasará nada.

Me fui a mi casa, estaba hundida ¿porqué le habían hecho eso a Nerea?
Estaba encerrada en mi habitación llorando, cuando vi la sombra de alguien en la
puerta ¿por dónde había entrado? ¿Quién era?

-Cata: ¿Quién está hay?

Sólo escuché una risa, estaba muy asustada, me encogí en la cama y empecé a
gritar.
Escuché a alguien abrir la puerta rápido, recordé que le di a Nerea cantante las
llaves, ya que viviría conmigo, debe ser ella, la sombra desapareció y apareció
ella en mi habitación.

-Nerea: ¿estás bien?
-Cata: estaba aquí.
-Nerea: ¿Quién?
-Cata: no se, vi su sombra, se rió, es un hombre.
-Nerea: cálmate.

Ella me abrazó para tranquilizarme, fue a la cocina para prepararme una tila, pero
yo no me quería quedar sola, me daba miedo.

-Nerea: la ventana estaba abierta, quizás entró y salió por hay.
-Cata: ¿y si vuelve?
-Nerea: piensa, ¿quién puede ser?
-Cata: no sé, pero esa risa la escuché antes. Pero no recuerdo donde.
-Nerea: tranquila, el miedo no te deja recordar. Estoy contigo.
-Cata: quiero que te alejes de mí.
-Nerea: ¿Qué? ¿Porqué?
-Cata: corres peligro aquí conmigo.
-Nerea: no me voy a ir.

En realidad no quería que lo hiciera porque tenía mucho miedo. No podía parar
de llorar. Así pase toda la noche, otra noche en la que no pegaba ojo.
Limpié con la ayuda de Nerea, fui al gimnasio y a hacer las compras, luego me
preparé y me fui a clases.
Estaba Reyes dando clases y me sentí un poco mal, llevaba mucho
tiempo sin descansar, estaba agotada y mi cuerpo estaba llegando al límite.

-Cata: profesora, ¿puedo ir al baño?
-Reyes: si, Marta ve con ella.
-Marta: ok!
-Cata: no hace falta.

Salimos de clase y fuimos al baño, entré y me eche agua en la nuca, estaba
mareada y algo pálida.

-Marta: ¿estás bien?
-Cata: si.

No pude decir más por qué se volvió todo negro.
Desperté en una habitación blanca, no sabía dónde estaba ni que había pasado.
Estaba sola hasta que entró Claudia y Marta.

-Claudia: ¿cómo estás?
-Cata: bien, ¿qué pasó?
-Marta: fuimos al baño y te desmayaste.

Ahora recordaba el mareo y la conversación con Marta.
Entro un señor a la habitación, iba vestido con una bata, era el médico.

-Doctor: señorita, le hemos puesto suero.
-Cata: ¿cuándo me puedo ir?
-Doctor: acabas de despertar y ya te quieres ir, ¿tan mal te tratamos?
-Cata: ¿cuánto tiempo llevo aquí?
-Doctor: dos días, estabas tan cansada que con el desmayo te dio un síncope.
-Cata: ¿qué es eso?
-Doctor: tranquila, estás bien. Sólo que el cansancio que tenías te venció y no
despertabas porque tenías que descansar. ¿Cuánto tiempo llevas sin dormir?
-Cata: no se doctor, pero bastante.
-Doctor: debes descansar, sino enfermarás.

El doctor salió de la habitación y fue a por mis papeles para que pudiera irme a
casa. Por fin me iría a casa aunque se que otra vez no podría dormir por el
miedo, el doctor me dio unas vitaminas para que las tomará con el desayuno.