Un año había pasado desde que Demián había llegado a la vida de ambas princesas, ________ se sentía volar cuando tenía a su hijo en brazos, lo adoraba tanto que cuando terminaba sus deberes iba a visitarlo, ella pasaba mucho más tiempo que Leonor con su hijo.
— Princesa — voltea a ver quién la ha llamado. — El rey requiere de su presencia en la sala del trono — miró a mi hijo en brazos y lo dejo en su cuna luego de dejarle un beso en la frente.
— Está bien, enseguida voy — el hombre se retira. — Iré a ver qué quiere tu abuelo y regreso para contarte una historia — le sonrió al niño que me da una sonrisa, me enamoró cada día de él, es tan hermoso.
— Vaya sin preocupaciones princesa, nosotras cuidaremos del pequeño príncipe — miró a las nanas y asiento agradeciendo con su lealtad a mi familia.
Madre había enviado a la que fue mi nana para ayudarme a cuidar a mi hijo y se lo agradecía demasiado.
— Gracias — ellas hacen una pequeña reverencia y salgo de la habitación de mi hijo.No sabía que necesitaba de mi persona el rey Felipe VI, solo quería pasar tiempo con mi hijo pues era lo más valioso en mi vida, era un pedacito de Leonor y mío, hablando de su otra madre, no ha ido a visitarlo demasiado.
Cuando intento hablar con ella se excusa con que tiene muchos asuntos reales que atender, cosa que es mentira pues tenemos el mismo título, por lo tanto tenemos los mismos asuntos que atender.
Hace días le encontré unos diseños de un anillo no sospeche nada pues tal vez mandaría a hacerse un anillo para ella misma pero fue raro ver el anillo en el dedo de Camilo.No dije nada para no arruinar la felicidad de tener a nuestro primogénito, pero las palabras de Irene se seguían repitiendo en mi mente una y otra vez.
— La princesa ______ de Asturias — anuncia mi llegada uno de los hombres parado afuera de la puerta que da a la sala del trono.
— Me ha mandado a llamar rey, ¿A qué se debe dicho honor? — miró a mi suegro sentado en su trono siendo imponente.
— Quería avisarte de que haré una fiesta en honor al príncipe Damián para presentarlo a la sociedad española, ¿Qué piensas de ello? — me mira curioso.
— Si lo desea su majestad que así sea, pero como su madre pienso que todavía es muy pequeño como para que debute ante la sociedad española, pero también como princesa sé que es mi deber dar a conocer a mi hijo y que lo reconozcan como parte de la familia real — él asiente.
— En tres días celebraremos por su primer año y todos vendrán a hincar rodillas por él — notifica.
— ¿Ha estado de acuerdo mi esposa? — él suspira.
— Mi hija no ha dicho nada, ella simplemente acepto hacerlo por eso acudí a ti, sé que has pasado con él bebé desde su nacimiento — asiento.
— No quiero que crezca sin el amor de sus madres, al menos no de mi parte, quiero que sea un niño cariñoso y digno de llevar la carga que será puesta en sus hombros a su debida edad — él asiente comprensivo.
ESTÁS LEYENDO
The Crown (Leonor de España y tú)
أدب الهواةUn matrimonio arreglado, una corona, tres corazones en juego, felicidad, alegría, tristeza, traición, ambición, amor, odio, lágrimas, gritos, sangre y el poder... Todo eso no importa ante la corona... El deber ante la corona es lo...