En el jardín del alma, donde florecen los sueños,
Hay corazones rotos, como pétalos caídos al suelo.
Duele el recuerdo, como una herida que no sana,
Pero en esa grieta, entra la luz, y comienza a brillar.No te rindas, corazón, aunque estés partido,
En tus fracturas, late una fuerza escondida.
Cada pedazo, es una historia, una lección aprendida,
Y en tus cicatrices, se esconde una belleza no vista.Levántate, corazón, y deja que el sol te toque,
Que sus rayos te sanen, y te hagan renacer.
No te escondas, que el dolor es parte del viaje,
Y en cada lágrima, hay una semilla de esperanza.Recuerda que el amor, no duele, sino que enseña,
Y en cada despedida, hay una bienvenida.
Así que no temas, corazón, a volver a amar,
Que en tus grietas, late la vida, y late el sol.Así que levántate, y deja que tu luz brille,
Que el mundo necesita, de corazones como el tuyo.
No te rindas, que el dolor es pasajero,
Y en tus fracturas, late una belleza eterna.