Soy un tonto, ¿verdad?

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Sí, Yoongi y Jungkook desde siempre fueron conscientes de que Taehyung tiene mucho dinero porque de eso todo el mundo hablaba en la escuela, pero jamás imaginaron que tanto.

Su casa prácticamente es una mansión. Hasta tiene de esos típicos guardias de seguridad parados a los costados del gran portón de hierro que la resguarda.

Ambos chicos sentían que no encajaban en ese lugar y si Taehyung no se hubiera molestado en recibirlos él mismo, hubiesen huido en la primera oportunidad que tuvieron.

Al entrar, se dieron cuenta que Jimin ya estaba allí, sentado en un sillón de cuero color turquesa que extrañamente combina con la elegancia de la sala de estar.

Pero lo que en verdad los dejó mudos fue ver a la mujer que lo acompaña a su derecha.

Porque no es nada menos que la famosa artista Kim Hyunah. Ella ya se había retirado de la industria musical hace más de 15 años, pero no habría quién no la recordara en todo el país.

—Buenas tardes, chicos. —Se levantó para saludarlos formalmente—. Es un gusto al fin poder conocerlos. —Su mirada se dirigió hacia el de coleta negra—. En especial a ti, Jungkook.

Ella le guiñó el ojo y Taehyung enseguida se puso todo rojo.

—¡Mamá!

Yoongi y Jungkook parpadearon aún más conmocionados. ¿Taehyung es el hijo de la polémica pareja de Hyuna y Dawn? Dos artistas que tuvieron que luchar contra su propia fama para poder estar juntos.

Oh, definitivamente, ellos tenían que ver más televisión.

Sin alargar de más las presentaciones, los cuatro se encaminaron hacia el área de música que está en la ala norte de la casa. Sí, así de grande es.

Toda esa área está conformada por varios instrumentos y equipos de sonidos, incluso dispone de algunas salas que se separan entre sí. Por lo que a cada "maestro-alumno" le corresponde una al final.

Sí, esa es la pequeña trampa de Taehyung y nadie lo podía culpar, él quería pasar tiempo a solas con Jungkook.

Sin querer escuchar mucha queja de por medio, hizo entrar a Jimin y a Yoongi en la sala que está al frente de la que van a utilizar ellos. Sin embargo, este último rápidamente se distrajo al no caber de la emoción porque jamás había estado así de cerca de tantos instrumentos a la vez.

—¡Es imposible que alguien use todos estos, joder!

Jimin no pudo ignorar su comentario, mirando sin la mitad de la fascinación que Yoongi desbordaba por todo su cuerpo.

—Bueno, no sé si los señores Kim los usan actualmente, pero TaeTae tuvo que aprender a tocarlos inclusive desde antes de que aprendiera a hablar.

Yoongi abrió sus ojos de par en par. Vaya, ese pelirrojo tenía algo de gracia después de todo.

—¿Sabe tocar todos los instrumentos que están aquí?

Jimin se mostró pensativo, mientras se sentaba en una de las banquetas del lugar.

—No sé si todos, pero hay algunos que maneja mejor que otros. —Entorno su mirada hacia él con malicia—. Por ejemplo, el piano, barrería el piso contigo.

—No me interesa. —Yoongi apretó sus dientes, prefiriendo darle su atención a su instrumento favorito—. Pero hablando de pianos, hay que comenzar a trabajar.

—¿Qué? —Jimin se descolocó por completo—. Si sabes que lo de enseñarme a tocar el piano no era en serio, ¿verdad?

Yoongi rodó los ojos, abriendo la tapa del piano para sentarse frente a este y darle la espalda.

Alianza Equivocada | yoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora