⁵Alicia y la Orden del Fénix [LRYEA]

11¬I WANT WHAT YOU WANT

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↻Quiero lo que tú quieras

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━━━━━━━POR FIN EL TREN EMPEZÓ A AMINORAR LA MARCHA Y OYERON EL HABITUAL ALBOROTO POR EL PASILLO, pues todos se pusieron en pie para recoger su equipaje y a sus mascotas, listos para apearse. Como Ron y Hermione tenían que supervisar que hubiera orden, volvieron a salir del compartimento encargando a Harry, Alicia y a los demás del cuidado de Crookshanks y Pigwidgeon.

—Yo puedo llevar esa lechuza, si quieres —le dijo Luna a Harry señalando la jaula de Pigwidgeon mientras Neville se guardaba a Trevor con cuidado en un bolsillo interior.

—¡Ah, gracias! —contestó Harry, quien le pasó la jaula de Pigwidgeon y así pudo sujetar mejor la de Hedwig.

Salieron del compartimento y notaron por primera vez el frío de la noche en la cara al reunirse con el resto de los alumnos en el pasillo. Lentamente fueron avanzando hacia las puertas. 

—¡Los de primero pónganse en fila aquí, por favor! ¡Todos los de primero conmigo! —oyó Alicia a lo lejos. Pero aquel grito no se oyó como el de todos los años. Era la voz de una mujer muy, que gritaba con un enérgico tono.

Era la profesora Grubbly-Plank, la bruja que el año anterior había sustituido durante un tiempo a Hagrid como profesor de Cuidado de Criaturas Mágicas.

—¿Dónde está Hagrid? —preguntó Harry en voz alta.

—Ni idea —contestó Ginny.

—Será mejor que nos apartemos, estamos impidiendo el paso —avisó Alicia.

—¡Ah, sí!

Alicia, Harry y Ginny se separaron mientras recorrían el andén y entraban en la estación. Harry y Alicia se miraron y pensaron lo mismo: ¿qué hacía la profesora Grubbly-Plank sustituyendo a Hagrid otra vez? Hagrid no podría haberse marchado, ¿no? Minnie se lo habría contado a Alicia de ser así.

Miraron alrededor buscando a Ron o a Hermione, pues querían saber qué opinaban ellos de la presencia de la profesora Grubbly-Plank, pero ninguno de los dos estaba por allí cerca, así que se dejaron arrastrar hacia la oscura y mojada calle que discurría frente a la estación de Hogsmeade.

Allí esperaba el centenar de carruajes sin caballos que cada año llevaba a los alumnos que no eran de primer curso hasta el castillo. Alicia y Harry los mir brevemente, se dio la vuelta para buscar a Ron y a Hermione, y luego volvió a mirar. Ahí estaban. 

Los caballos.

Alicia siempre los ignoraba pues sabía perfectamente lo que significaba verlos. Pero entonces se dio cuenta de que Harry se había parado a verlos. Mierda.

—¿Dónde está Pig? —preguntó la voz de Ron detrás de ellos.

—La llevaba esa chica, Luna —respondió Harry volviéndose con rapidez, ansioso por preguntar a Ron por Hagrid—. ¿Dónde crees que...?

—¿... está Hagrid? No lo sé —contestó su amigo, que se mostraba preocupado—. Espero que esté bien...

Cerca de ellos, Draco Malfoy, seguido de Crabbe, Goyle y Pansy Parkinson, apartaba a unos alumnos de segundo de aspecto tímido para que él y sus colegas pudieran tener un coche para ellos solos. Unos segundos más tarde, Hermione salió jadeando de entre la multitud.