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Adrien

Jessica pasó un mes aquí en París, y ya era la hora de irse.

Mi familia, mi novia y yo vinimos al aeropuerto a despedirnos, aunque esto no era un "adiós", sino un "hasta luego".

Mis padres y Chloe ya se habían quedado mucho con ella hablando y luego fueron a una de las cafeterías, luego iríamos con ellos.

Marinette se había encariñado mucho con ella que ayer lloró cuando supo que hoy se iba, aunque estarán comunicadas.

—Estoy muy feliz de haberlos conocido, y de haber venido. La pasé muy bien este tiempo en la ciudad del amor— exclamó la pelirroja mientras abrazaba a mi novia— Y me gustó mucho hablar contigo Marinette.

—A mí también— respondió la azabache con la voz un poco cortada— Que no se te olvide llamar.

—No lo olvidaré, me alegra que podamos seguir en contacto, y no solo por trabajo— pude notar que sus ojos dejaron de verla para enfocarlos en algún lugar detrás de nosotros.

—¿Estás esperando a alguien? — inquirí cruzándome de brazos, porque pude sospechar a quien estaba buscando.

—Si... Es que... ¡Oh! Allí está.

Marinette y yo nos giramos para ver a quien se refería, y no fue mucha sorpresa cuando vimos a Zoe correr hacia nosotros.

—Las dejaremos solas para que se despidan tranquilas— habló Marinette. Agarró mi mano y nos alejamos. Cuando nos cruzamos con Zoe, nos saludó con la mano sin detener su paso, y nosotros hicimos lo mismo.

A la distancia pudimos ver como esas dos interactuaban, y se notaban algo nerviosas.

Jessica me contó que la había pasado muy bien aquí, pero no volvió a mencionar su relación con Zoe, y la rubia tampoco dijo nada, ni siquiera a Chloe.

El altavoz informó sobre el vuelo a Nueva York, y mi amiga ya tenía que abordar el avión. Pareciera que se les olvidó lo que es un abrazo, porque no pudieron dárselo al principio, pero cuando se separaron, lo que me sorprendió fue Jessica le robara un beso.

Desde aquí se notan lo sonrojadas que están.

Jessica por fin se fue a abordar el avión, y la rubia se quedó allí por un rato, pareciendo procesar lo que pasó.

—Creo que se le olvidó como respirar— dijo Marinette. Tenía los brazos cruzados y una sonrisa plasmada en su rostro— Vamos a ayudarle a recordarle como se hace.

Caminó en dirección a la rubia y yo le pisé los talones. Cuando estuvimos más cerca de ella, fue cuando se dio cuenta de nuestra presencia.

—¿Vieron eso? — preguntó Zoe sonriendo avergonzada.

—Y no solo nosotros, sino todas las personas en este aeropuerto— contesté —Teníamos la sospecha de que había algo entre ustedes después de que hablaron en el zoológico.

—Es que no hay nada de lo que ustedes piensan.

—¿Y ese beso que te dio que significa? — inquirió mi novia.

—Fue de despedida, nada más.

—¿Y por qué no hay nada? — Marinette siguió preguntando.

—Ambas nos gustamos, pero ninguna quiere una relación a distancia, así que no llegamos a más que una amistad.

Me sentí triste por ambas, en que no puedan avanzar más. Espero que les vaya bien con una amistad a larga distancia, ya que el noviazgo no se pudo.

Zoe pregunta por Chloe, y yo le dije en que cafetería estaba, también le pedí que le dijera a ella y a mis padres que estaría con Marinette el resto del día. Quise ir con ellos, pero cambié de opinión.

▪︎Por lástima▪︎ |Adrinette|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora