More Time |Ben10|

~More Time~

Gwendolyn estudió el hechizo del portal del tiempo por millonésima vez, tratando de averiguar qué había salido mal esta vez. Por más que lo intentó, simplemente no pudo hacer que el hechizo funcionara. Había estado tratando de hacerlo bien durante los últimos 7 años. Sin embargo, todavía la eludia.

Sabía que habría consecuencias por usar el hechizo, que podria cambiar su linea de tiempo de formas desconocidas. Ya no sería la misma persona, y tampoco nadie más.

Y ese era el punto. Tenía que intentario. Estaba desesperada. Ben 10,000 no duraria mucho más si ella no tuviera éxito. Se había estado hundiendo en el suelo durante años, obsesionado con patrullar la Tierra y luchar contra todos los criminales del planeta. En estos dias, vivía en su cuartel general, se tomaba todo demasiado en serio y no tenía tiempo para descansar ni divertirse.

Estaba constantemente exhausto, quemado, de mal genio, un completo idiota para todos. Se aisló y actuo como si no tuviera tiempo para preocuparse por nadie. No quería ni necesitaba ayuda, le había dicho. Eso había dolido. Siempre habían sido un equipo.

Aunque todavía confiaba en ella, le dejó claro que en realidad no la necesitaba. Simplemente toleraba su presencia y los intentos de ayudarlo.

No era como si no hubiera otros héroes que quisieran ayudar. Los Ejecutores Galácticos se quejaban constantemente de que no les dejaba nada que hacer, y había muchos otros con superpoderes que estaban comprometidos con la defensa del planeta.

Pero Ben actuó como si solo él pudiera salvar el universo. Era como si él hubiera olvidado que era humano, y ella no sabía cómo recordarle que lo era.

Tenía que pensar en algo antes de que él cayera muerto de un ataque al corazón ante sus propios ojos.

Ciertamente se dirigía en esa dirección. Ella no podía permitir que eso sucediera. Tenía solo 30 años y era demasiado joven para morir de esa manera.

Él no podía seguir viviendo así, y ella tampoco. Se había quedado a su lado y había sido su compañera constante durante los últimos 20 años. Debería haberlo dejado hace mucho tiempo. En muchos sentidos, ella lo estaba permitiendo. Ella lo sabía, pero no se atrevía a dejarlo. Ella lo amaba demasiado. La necesitaba, aunque no le gustaba admitirlo. Ambos estaban atrapados. No creía que pudiera soportarlo mucho más. Algo tenía que ceder.

Anhelaba volver el tiempo atrás y cambiar el pasado. Si tan solo hubiera sabido en ese entonces lo que sabía ahora... tal vez le habría dicho hace mucho tiempo que lo amaba, que no tenía por que estar solo. Hubo tantas ocasiones en las que podría haber dicho algo. En el pasado, a menudo habia sospechado que él sentia lo mismo por ella. Estaba segura de que si ella le hubiera dado alguna indicación de que ella le correspondería, él le habría confesado su amor hace mucho tiempo.

Pero había tenido demasiado miedo de decirselo, y ahora era demasiado tarde.

Y así siguió trabajando en el hechizo del portal del tiempo.

...

Finalmente, después de años y años de intentarlo, Gwendolyn había dominado el hechizo del portal del tiempo.

Lo había usado para secuestrarse a sí misma a los 10 y traerla de regreso al futuro. Sabía que Ben la seguiría. Siempre lo hizo.

Esperaba que le recordara a Ben 10,000 cómo había sido cuando era niño, despreocupado, aventurero y cariñoso con su familia. Que todavia podía ser un héroe y Ben también. Que se daría cuenta de que todavia podia amar y depender de los demás.

Incluso si no lo hiciera, no era demasiado tarde para que Ben, de 10 años, tomara decisiones diferentes. Sabía que a él no le gustaba cómo había resultado Ben 10,000, y esperaba que Ben 10 hiciera cambios.

También esperaba que su yo más joven entendiera lo importante que era apreciarlo. No dejes que termine así. No dejes que salgamos de esta manera. Era su súplica silenciosa a su yo más joven.

En estos días, Gwendolyn nunca tuvo la oportunidad de estar a solas con Ben, y mucho menos hablar realmente con él. Nunca fue Ben. Siempre estuvo en forma alienígena y nunca se detuvo ni por un segundo. A menudo sentia que le había fallado porque no podía evitar que se destruyera a sí mismo.

Pero su yo más joven podría influir en el Ben más joven. Todavia hablaban, y todavía estaban cerca. No importaba lo mucho que pelearan y se burlaran, ella podia ver lo mucho que se querían el uno al otro. Podía recordar cómo solían ser las cosas entre ella y Ben.

Le habia divertido ver a su yo más joven poniendo a Ben en su lugar. Ella siempre le decía exactamente lo que pensaba.

¿Cuando había cambiado eso?, Supuso que después de darse cuenta de que estaba enamorada de él, se había vuelto más difícil para ella decir lo que pensaba de él.

Pero ver a su yo más joven hacerlo y con tanto éxito le recordó lo importante que era. La animó y le dio coraje. Le dio esperanza.

Quería recuperar esa cercanía.

...

Mientras veían a Ben y Gwen, de 10 años, desaparecer en el portal del tiempo y regresar a su propio tiempo, Gwendolyn no pudo evitar sonreír.

Ella solo esperaba que fuera suficiente. Solo el tiempo lo diria. Si las cosas cambiaran, ella no lo recordaria de todos modos. Ojalá hubiera cambiado el pasado y el futuro.

Estaba cansada de tener tantos arrepentimientos y de desear constantemente poder regresar y hacerlo todo de nuevo. Lo que más lamentaba no eran las cosas que había dicho, sino las cosas que no había dicho. Ella lo había lastimado más al permanecer en silencio. Ella lo sabia ahora.

Enamorarse de él la había cambiado. Le importaba demasiado lo que el pensara de ella, y eso la hizo demasiado cautelosa. Le impedia regañarlo cuando realmente lo necesitaba. Estos días le resultaba dificil estar en desacuerdo con él o desafiarlo. Él no la escucho de todos modos.

No solía ser así.

Miró hacia donde el estaba parado. Estaba mirando el lugar donde había estado el portal del tiempo, perdido en sus pensamientos.

Se preguntó si él también se arrepentiria.

Él la atrapó mirándolo, y ella rápidamente desvió la mirada.

Se acercó a ella y, para su sorpresa, la abrazó con fuerza.

— Gracias — dijo suavemente.

— De nada — logró decir.

Él le sonrió. Había tanto afecto y gratitud en sus ojos. Trató de no sentirse cohibida. No podía recordar la última vez que había estado tan cerca de él.

Tal vez no tuvo que esperar a que su yo más joven cambiara el futuro, su presente, después de todo. Tal vez, tal vez nunca fue demasiado tarde.

~ Fin ~