Los Abuelos Han Llegado

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Severus seguía a James son pasos torpes pero seguros. No sabe a donde lo desea llevar, pero aun así se mantiene en guardia y sinceramente, puede sentir la presencia de Lucius y de Jack cerca de ellos. Suspira, en definitiva, Lucius y Jack son demasiado protectores con él.

- Sabes, les puedes decir que no te haré nada malo - dice James, dejando de caminar y volteando a ver a Severus

- ¿Quién? - cuestiono con tranquilidad y fingiendo estar sorprendido

James suspira y niega. Esta claro que incluso Severus desconfía de él y con buena razón, pero él no era tan malo.

- Por favor, no te haré nada malo, tienes mi palabra - asegura James, mirando a los ojos a Severus - De ser necesario, hago un juramento

- Basta - dice Severus, alzando su mano y evitando que él diga algo más - No será necesario, chicos estaré bien

Aquello no va para él, lo sabe y después de escuchar las protestas de Jack, ambos siguen su camino hacía los jardines de la escuela. Una vez que están frente a frente, James da un paso hacía Severus, mientras que él retrocede ese mismo paso.

- ¿Por qué huyes de mí? - cuestiona James con curiosidad - No te haré nada malo, tienes mi palabra

- Aunque la tenga, es un reflejo que tengo contigo - expresa Severus

La manera indiferente en como lo dice Severus, hace que James tiemble. Le ha hecho demasiado daño a Severus.

- Lo lamento - dice, para después señalar la banca de piedra que había cerca - ¿Podemos sentarnos?

- Supongo que sí - asiente Severus

Los dos toman asiento. Donde están, pueden ver el amplio jardín que es la escuela, junto al agua del lago negro que se asoma poco a poco, escuchan fácilmente el canto de las lechuzas junto a otras aves, incluso pueden escuchar los ladridos del perro de Jack.

- Potter, se que no me llamaste aquí para hablar del plan de asesinato que Jack esta planeando para ti - asegura Severus, mientras se giraba para verlo - Así que habla

James siente que se puede desmayar. Era cierto, Jackson se había puesto de acuerdo con Malfoy y Lord Prince para planear su muerte, pero aquello no le importaba en lo absoluto.

- No es eso, de lo que quería hablar contigo, es de nuestro futuro - expresa James, ganando una mirada de Severus - Realmente quiero intentarlo, se que he sido un idiota, pero ver a nuestros hijos juntos, verte con ellos es lindo

Severus se queda en silencio, su garganta adquiere un nudo. Desea perdonarle, decirle que todo queda resuelto, pero de pronto, las bromas que ha sufrido a manos de ellos, sobre todo de él, hacen que su corazón duela.

- Tu quieres formar esta familia conmigo, pero dime James, ¿Cuántas veces me jodiste la existencia por tus bromas? ¿Cuántas veces soporte que me insultaras solo por tu obsesión hacía Evans? - cuestionó Severus - ¡¿Cuántas veces tuve que ir a la enfermería por tus tontearías?! o peor aun, ¿Cuántas veces miraras a mis niños por ser slytherin?

James se quedo en silencio al ver las lagrimas bajando por los ojos de Severus, bañando por sus mejillas, era una imagen que nunca se imagino ver en el príncipe de Slytherin.

- Yo... No voy a...

- No James, ciertamente no me importa lo que ha pasado entre nosotros, pero me atormento en pensar que tu puedas dar tus mordaces comentarios de odio hacía slytherin puedan afectar a nuestros hijos y...

Severus se rompe a llorar, mientras que James lo observa. El pequeño Prince estaba dejando de lado el hecho de todo lo que le ha pasado, todas las malas bromas, pero parece no permitir tocar a sus hijos, porque ellos son lo que más ama.

𝐋𝐞𝐲𝐞𝐧𝐝𝐨 𝐄𝐥 𝐑𝐞𝐲 𝐄𝐬𝐭𝐞𝐥𝐚𝐫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora