Capítulo 16

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PeterCasi volví de forma resignada, caminaba por los jardines de la facultad de artes los cuales no estaban vacíos, pero si había mucho menos movimiento, acomodaba los últimos detalles de mi ropa y no dudaba que cuando entrara a la biblioteca ella...

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Peter
Casi volví de forma resignada, caminaba por los jardines de la facultad de artes los cuales no estaban vacíos, pero si había mucho menos movimiento, acomodaba los últimos detalles de mi ropa y no dudaba que cuando entrara a la biblioteca ella ya no estaría, y si lo hacía, entonces posiblemente estaría muy molesta.

Me había tomado mucho más tiempo del que había creído al inicio y no estaba seguro si quería enfrentarme a lo que podía venir a continuación.

Suspiré una vez más antes de ignorar las penumbras que quedaban afuera y entré, a simple vista no pude ver a nadie más que a la bibliotecaria casi durmiéndose en su escritorio, rasqué mi nuca aún más nervioso y avancé durante los estantes para encontrar la mesa en donde habíamos estado algunas horas atrás.

Me detuve cuando vi que nuestras cosas estaban en el mismo lugar, parecía que había regresado los demás libros a donde pertenecían pero su mochila sin duda aún estaba ahí. Avancé un poco más porque ella no estaba en la mesa y la encontré en un pequeño pero acogedor sillón junto a una de las ventanas más grandes, veía hacia afuera, en dirección contraria por donde yo había entrado. En un segundo, ya había reconocido mi reflejo en el cristal y su rostro sorprendido se hizo más evidente cuando se levantó y dio la vuelta para caminar hacia mi.

-Peter ¿qué...- guardó silencio.

El pánico comenzó a invadirme cuando no pude interpretar la mirada que me estaba dando.

-Oye Mad, de verdad lo lamento mucho, nunca creí que fuera a llevarme demasiado tiempo, no quería hacerte esperar- me giré levemente porque sentía que la culpa no me dejaba verla directamente.

"Y aún así no pudiste salvar a tu novia..."

-Se que eres una persona ocupada, solo...-

¿Y qué pasaba si tampoco podía protegerla a ella?

Volví a verla, seguía quieta ahí, con la misma mirada, me sentiría como un monstruo de verdad si alguna vez llegaba a lastimarla o dejar que alguien más lo haga.

-¿Quién te golpeó?- su voz sonó tan amenazante que por un instante no tuve idea de que pensar o sentir.

-¿Qué?- fue lo único que pudo salir de mi boca.

-Tu mejilla esta morada- se acercó y cuidadosamente tomó mi mentón para acercar más mi rostro al suyo, tuve que inclinarme un poco debido a mi altura, a esta distancia podía ver mejor que la mirada que no pude interpretar antes y que parecía tan extraña en su rostro siempre sonriente, era furia -¿Quién. Te. Golpeó?- volvió a preguntar entonando lentamente.

¿En verdad no le importaba que la hubiera hecho esperar tanto? Aun más, ¿en verdad le molestaba la idea de que alguien me hubiera lastimado?

-Mad yo...-

-Peter, por favor- su mirada cambió un poco a la suplica para que yo le contara solo para en un momento más centellar de nuevo su enojo -dime quién fue y te aseguro que tendré una conversación y muchos problemas con esa persona-

TASM: A las sombras de Nueva York (Andrew Garfield)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora