One shot Yoonseok

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El moreno descansaba la cabeza sobre el pupitre con los brazos sirviéndole de almohada, tenía una expresión somnolienta de tanto aburrimiento, y es que ese día para su mala suerte sus amigos no habían asistido al colegio.

La risas de algunos compañeros resonaban en el salón de clases, los pasos de estudiantes correteando de aquí para allá, hablando de cosas triviales y que para su mala suerte no podía contarle a sus amigos.

— Traidores...—refunfuño formando un puchero, recostó su cabeza de nuevo sobre el pupitre y cerró los ojos, dispuesto a dormirse cuando escuchó una voz ronca y profunda hablarle.

Esa voz...

—¿Jung? ¿Me puedes explicar que significa esto? —exigió saber el pálido, mostrandole un ticket canjeable color marrón. —¿es una broma?

Hoseok trago en seco con nerviosismo, mientras sus mejias se tornaban rosas al leer el contenido del cupón.

«Cupón válido para una mamada»

—¿Cóm-o sabés que es mío? Alguien más pudo haberlo dejado, —tartamudeo al tiempo que se ponía de pié, a todo esto ya habían llamado la atención de los estudiantes dentro del aula.

El pálido sonrió, iba responder con obviedad pero Wonho se le adelantó, diciendo una estupidez sarcástica.

—Hoseok no chupa pitos pequeños, Min —se burló Won colocándose detrás del moreno, se cruzó de brazos y lo miró —¿Cierto, bombón?

Hoseok se puso más nervioso, ya había escuchado mucho antes los rumores que decían sobre el pálido, también los apodos para nada profesionales con los cuales le llamaban.

—Estoy seguro que ni en tu gran bocota cabría, por lo grande que es —le lanzó una mirada mordaz que lo dejó callado, observó al moreno y le respondió — Lo sé, porque aquí está escrito tú nombre.

Debía ser una broma maltrecha de parte de sus compañeros, quizás alguno se enteró de su pequeño secreto y es por eso que le habían gastado una broma.

¡¡CON MIN YOONGI!!

—Yo, jumh .—el moreno se rasco la nuca con evidente nerviosismo, Wonho que aún seguía a su lado y con una expresión de enojó, le tomó del brazo.

—Es obvió que no. —aseveró cruzándose de brazos —Hoseok es un bonito chico y no creó que haya sido capaz de hacer tal cosa....Además todos sabemos que tienes un pito pequeño, Min ¿Quién querría chupartelo?

Se escucharon las risas de algunos compañeros, y Seok no evitó sentirse mal por Yoon, no estaba a gusto con los comentarios que le hacían al mayor, además llevaba tiempo gustandole, porqué sí, Min Yoongi le gustaba y mucho.

—¡No te lo estoy preguntando a ti! —alzó la voz ya cabreado, el pálido miró de nuevo a Hoseok esperando una respuesta de su parte.

Hoseok pensó que esa era su oportunidad y sabría aprovecharla.

—Sí, fui yo — asintió caminando hacia el pálido para llevárselo arrastras de ahí. Dejando a todos con la boca bierta; en un nanosegundo había tomado la decisión más precipitada que jamás haya tenido, se lo chuparia a Yoongi y así desmentiria todos esos rumores; —¿Quieres canjearlo, hyung? —preguntó firmemente durante el caminó, Yoongi no dudo en asentir, tampoco se haría el de rogar.

Hoseok sabía que los estudiantes le seguían para saber a hacia dónde se llevaba al pálido, y todos soltaron un jadeo ahogado cuando Seok encerró a Yoongi dentro del cubículo del bañó, echándole doble llave.

¿Qué se dice después de una mamada? 《Yoonseok》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora