º·28 de junio del 2022·º
Daven McClaire Alonso
Me levanto con mi chico casi encima mía, susurrándome que solo quedan dos días y sonrío, verlo contar los días junto a mí, me parece un sueño, un sueño que de pequeña me acechaba día sí día también porque aun con nuestra diferencia de edad y del curso de la vida, siempre ha sido él.
Vamos hacia la cocina y me doy con el bando de la puerta del comedor y exagero un poco el golpe y él se ríe y me hago la enfurruñada pero acabo riéndome a los segundos de mirarle.
En teoría pasado mi cumpleaños me bajará la regla y no estoy muy centrada que se diga, mis emociones se revolucionan por minutos, segundos, tiempo y sonidos, la música que escucho es más sentimental y una mirada me puede hacer lagrimear. Pero junto a mi niño, todo mejora, aunque sea un mínimo.
Desayunamos y como también queda nada para que empiece a trabajar, vamos a pasear, nos tomamos camino largo y salimos de Génova para dar camino y irnos a donde nos apriete, haciendo coche y karaoke mientras las canciones suenan por la radio más suaves.
Cuando ve que queda una salida para Portofino, me pregunta si me apetece parar y asiento, así que la toma y al llegar unas ganas de mear tremendas me aprietan y nos acercamos a un bar, aprovechando para tomarnos algo.
Salgo del baño y busco donde se ha sentado y voy hasta él, antes de sentarme me acerco a él y nos besamos. Luego me siento a su lado para estar más cerca y apoyo mi cabeza en uno de sus hombros mientras nos preparan las coca-colas.
Cuando llegan, abro la lata y doy un sorbo sin poner en el vaso y luego del sorbo ya pongo en el vaso, antes de bajar del coche, creo que subestime la sed que tenía. Sash se me queda mirando y se sonríe.
Le lamo el lóbulo de una oreja y le susurro que le amo y él luego de decirme, que él me ama más, me dice que se lo devolveré y bebemos unos tragos, en una tensión sexual.
Nos traen unas patatas chips y lo miro, me dice que él no ha pedido nada y me encojo de hombros, los disfrutamos y luego al pagar no nos las cobran, nos dicen que es de invitación, agradecemos y nos vamos. De nuevo en el coche, le doy las gracias y me dice que no es nada y sonrío.
Le digo que si no llega a regalarme nada pasado mañana en mi cumple, que no pasa nada porque el día de hoy para mí ya es suficiente.
Él niega y arranca, con eso empieza a sonar música y mi instinto me hace empezar a cantar, disfrutamos del camino y en un rato me quedo dormida, donde luego de un largo rato, me despierta en Rapallo.
Ha aparcado el coche en un lugar central de la ciudad y vamos al indicador de turismo a coger un itinerario y paseamos por las calles hasta encontrar un bar cuando nos da sed. Me dice que aprovechemos para comer y asiento aun sin hambre.
Pedimos si hacen comidas en este bar y nos dicen que sí, por lo que hacemos un dos por uno, pasando aquí, dos horas.
Tras eso, paseamos un poco más y me dice que vamos a un centro comercial de paseo y compras y que, compremos trajes de baño y vayamos a una piscina.
Al llegar al centro comercial, dejamos el coche en la planta dos del parking y entramos. Cuando veo un Victoria Secret, voy directa allí y él me dice a zancadas. Entro y doy un vistazo a todo el lugar, y luego voy a donde más me ha gustado.
Cuando salimos del Victoria's, vamos a una tienda que le ha pintado a él y disfruto de verlo como niño pequeño y la facilidad que tiene de dejarlo salir. Tras comprarse un funko de Natsu, vamos a lo de los trajes de baño, comprándome un trikini, negro, blanco y azul.
Luego volvemos a tomarnos algo en un bar de pasillo y luego nos vamos ya para la piscina municipal.
Al llegar, me pongo el traje de baño en los asientos de atrás de nuestro coche y luego entramos. Disfruto del agua y hago pinos seguidos y luego un largo buceo, donde me llego un micro susto.
Al salir de debajo el agua, lo miro con mala cara y me abraza para que no me salga y me pide perdón... Me dura unos minutos pero me acabo relajando y me besa.
Luego, salimos y nos tumbamos en las toallas que hemos cogido también y me duermo. Cuando empiezo a desvelarme, siento cómo alguien me va tocando la espalda como si fuera a romperse y lo miro como puedo, me sonríe y me da las buenas tardes, llamándome dormilona.
Al rato nos salimos de la piscina y subimos al coche, yendo ya para Génova, de vuelta a casa, y yo me duermo sin esperarlo. El camino se hace algo más largo, y hacemos más paradas por el cansancio, pero bien. Al llegar a casa, subimos lentamente y nos acostamos sin cenar.
Ponemos la tele a bajo volumen por simple ambiente, pero nos arronzamos abrazados y cerramos los ojos. Yo me quedo dormida y él no lo sé.
880 palabras.
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Mrs Baker Alonso's ❣️ Mireia Campdelacreu Ortega ❣️✅
Fiksi RemajaDaven es una recién graduada de la universidad que no se decide al próximo paso. En Italia, en una tarde de bares con su prima, se topa con Sasher. Con solo mirarse ya sienten una chispa recorrerlos. Tras algo, una aura empieza entre ellos y aventur...