Mordida Equivocada- NOMIN

capitulo tres

Capítulo tres. 

Jaemin siempre había odiado las discotecas. 

No se trataba de que no le gustara divertirse, salir con amigos y pasar un buen momento en un sitio donde había mucha gente. Su problema comenzaba en el poco respeto con el que se encontraba. Cuando aceptaba ir era porque jeno se lo pedía y porque debía cuidarlo —cuidar que no se metiera en problemas y escándalos— y en esas ocasiones jamás faltó la presencia de más de algún alfa que quisiera pasar una noche con él… a la fuerza.

Entendía que para el resto era un omega atractivo y demás, sin embargo no entendía por qué creían que tenían el derecho de imponer con quién debía acostarse. Nunca se dejó manejar y obligar, muy a pesar de que con la fuerza que tenían podían someterlo en un segundo, pero para su suerte jeno era un buen amigo y sabía a lo que se enfrentaba al ir a ese tipo de lugares, así que siempre se mantenía atento y cada vez lo salvó ahuyentando a los alfas. Porque que un omega le dijera que no a un alfa era inaceptable, pero ¿un alfa diciéndole a otro que no toque a un omega? Podría crear una fuerte pelea si se llegaba a negar, algo que nadie quería y pocos se atrevían a enfrentar. Lo peor era que sabía que pasaría en más de una ocasión durante esa noche, así que no le quedaba más que pensar alguna manera de evitar problemas. Solo esperaba que cuando sucediera alguno estuviera cerca para ayudarlo si se complicaba su situación, incluso Steven, que a pesar de que se llevaran un poco mal, si notaba que algún alfa lo estaba molestando no dudaría un segundo en ayudarle. Al final del día eran amigos y debían cuidarse entre todos.

Jeno y el resto de sus amigos tardaron más de media hora en arreglarse y cuando estuvieron juntos deseó que hubieran tardado más porque no se demoraron en empezar a hacer escándalos en lo que se marchaban, aún estando en el lobby del hotel. Jeno hablaba de lo tanto que le molestaba tener que casarse a su edad, Johnny le daba la razón porque según él los omegas eran un dolor de cabeza, yuta se mantenía en silencio asintiendo de vez en cuando y Brandon exclamaba que en el viaje debían poner música. Jaemim solo pensaba en lo tanto que quería regresar a su habitación para dormir o comer, o quizá mirar una película. Quizá hablar con jaehyun. 

Cuando quince minutos después llegaron jaemin se encontró con un lugar que era como pensó que sería. Había mucha gente: alfas, betas y omegas. Todos bailando con todos, todos bebiendo del vaso de todos, y por supuesto su grupo de amigos no tardó en unirse al tumulto dejándolo prácticamente solo y a su suerte hasta llegar a la barra. Casi se sorprendió pero recordó que no era la primera vez que lo hacían, pues a pesar de que no les molestaba cuidarlo también querían divertirse. Los entendía un poco. Trató de no pensar mucho en ello y buscó distraerse observandolos ir de un lado al otro, hablando con desconocidos y bebiendo de muchos vasos ajenos. 

Pidió una bebida de extraño nombre y la bebió con tranquilidad, sin tener muchas ganas de emborracharse tan rápido como sucedía la mayoría de las veces que ingería alcohol. El bartender, que era un beta, intentó hablar con él en más de una ocasión y no hubiera tenido problema en hacerlo si no fuera porque apenas tenía tiempo con la cantidad de gente que se acercaba a comprar. Así que mientras se iba y volvía en varias oportunidades, se encargó de buscar con la mirada a sus amigos entre la multitud de personas. 

Tener prendas de jaehyun puestas no sirvió para evitar que los alfas se acercaran ya que era sabido que no todos respetaban a un omega reclamado, por lo que debió rechazar más de una bebida e invitaciones a bailar. Algunos se enfadaban y hacían un pequeño berrinche pero enseguida se marchaban en cuanto veían que no se dejaría intimidar por ese tipo de tratos. Eso le hizo saber que solo eran niños mimados que no aceptaban ser rechazados y que no representaban amenaza alguna. Sin embargo, hubo uno con el que no corrió la misma suerte ya que comenzó a alzar la voz y se estaba acercando de más. Intentó buscar algo de apoyo en bartender pero no lo encontró y deseó que alguno de sus amigos estuviera cerca para ayudarlo. Decidió buscar su celular para intentar contactar a alguno en el mismo momento que jeno apareció en su campo de visión.