Mordida Equivocada- NOMIN

capitulo cuatro

Capítulo cuatro. 

Jaemin se mantuvo callado en lo que jeno hablaba con su padre. No hizo más que mirarlo, deseando escuchar la otra parte de la conversación, aunque sabía que esa sería una muy mala idea porque no tenía duda de que no saldría nada bueno para él. En esos momentos lo que probablemente quería hacer Lee donghae era matarlo. Lo entendía, pues se suponía que solo había ido a ese viaje para cuidar que jeno no se metiera en problemas, y si lo hacía nadie debía enterarse de ello… tarea en la cual fracasó porque de alguna manera, todo el mundo sabía de lo sucedido luego de que fue el causante del escándalo. 

Todavía estaba acostado en la cama, vistiendo nada más que su ropa interior, observando a su amigo caminar de un lado al otro en la habitación mientras hablaba. Por su parte, su celular estaba apagado luego de que lo agarró y vio múltiples mensajes de su familia (lo cual era un desastre porque tenía buena relación solo con su hermana) y de jaehyun, entonces decidió que por el momento, al no saber qué sucedería, no quería ni siquiera leer lo que tuvieran para decir. Ambos eran los más importantes de toda la cantidad de personas que se comunicaron con él y los únicos que le parecían relevantes, así que ignoró el resto… y también a ellos, al menos hasta que estuviera más tranquilo. 

Su cabeza no dejaba de crear escenas en las que llegaba a corea y se encontraba a toda su familia reunida para decir lo tan decepcionados que estaban de él. Incluso los entendería si así sucediera, pues también se encontraba decepcionado de sí mismo, muy a pesar de que no tenía ganas de que fuera una realidad. Lo único que quería era que alguna de esas personas tratara de ayudarlo en vez de juzgarlo, pero sabía que no pasaría. Y estaba perfecto porque era prácticamente imposible que jaehyun, siendo tan amable como era, quisiera perdonar algo como eso y ayudarlo a resolverlo. Mientras que su hermana yeri más de una vez le dijo que le agradaría que estuviera en pareja con jeno porque parecían ser el uno para el otro, por lo que dudaba que le diera una mano cuando su fantasía se estaba haciendo realidad. 

Entonces se encontraban solos. 

Solos y con la compañía del padre de jeno, que no resultaba para nada un alivio porque sabía que buscaría destruirlo apenas lo viera. Y no se podrían escapar de nada de lo que fuera a hacer con ellos. Hasta estaba temblando de solo pensar en enfrentarlo, pues el tipo siempre lo buscó intimidar y jaemin nunca dejó que lo hiciera, pero ahora habían arruinado muchos planes y no le daría tregua alguna. Además, no sé trataba de simples rebeldías como años atrás. 

Continuó observando a jeno, deseando para sí mismo que estuviera con él ahí en la cama, abrazándolo como muchas veces lo hizo cuando se encontraba mal. Dándole ese consuelo que solo con él sentía, y ahora mucho más porque había un lazo de unión que los unía. Pero tampoco se lo pediría tan directamente porque le daba vergüenza mostrarse tan necesitado. ¡Ni siquiera con jaehyun lo fue en algún momento! 

—Entiendo —dijo jeno con un profundo suspiro, dejando de caminar. Quedó en frente de la cama y lo miró. Jaemin se mordió el labio inferior con nerviosismo—. No seas imbécil, papá, deja de hablar así de él porque ambos tenemos la misma culpa. ¿Y adivina qué? Tú eres el mayor culpable porque si no hubieras querido obligarme a unirme con esa omega este viaje no sucedía y todo lo que luego vino. 

Jaemin estaba de acuerdo y asintió dándole la razón. No quitaba la responsabilidad que ellos tenían al respecto, pero si donghae no hubiera obligado a jeno a casarse con una omega en lo absoluto estarían allí, en tal situación.

—Oh, vamos. Por más que lo odies sabes que él no es así. Mejor cierra la maldita boca y habla con la clase que dices tener porque esto te humilla. 

No necesitó escuchar más para saber qué estaban hablando de él. No era extraño en lo absoluto, pues siempre que pudo Lee Jeno lo insultó con palabras correctas y sin ser directo, desde que conoció a jeno en la escuela y se hicieron muy amigos a una corta edad, hasta la actualidad. Luego de un tiempo, debió dejar de ir a su casa porque el desprecio del alfa se volvió demasiado para soportar. En cambio, en su casa, todos amaron a jeno desde un principio y lo aceptaron sin problema. Incluso en ocasiones iba cuando se peleaba con su donghae y no quería verle la cara, y se quedaba durante días.