𝙖𝙢𝙖𝙧 𝘢 𝘭𝘢 𝘱𝘳𝘪𝘯𝘤𝘦𝘴𝘢 || 𝗹𝗶𝗽𝘀𝗼𝘂𝗹 𝗔.𝗨 ©️

06

"usted es una mujer hermosa y llena de conocimientos, señorita jeong... y yo quiero que todos sus conocimientos sean sólo míos".

"usted puede quedarse bajo mí techo, siempre y cuando me deje tener todo de usted".

jinsol abrió sus ojos como platos y se alejó rápidamente de jungeun, moviendo su boca varias veces intentando decir algo; jungeun puso una expresión que denotaba un poco de extrañeza, más que todo por la reacción tan estrepitosa de la pelinegra.

─ y-yo... no puedo hacer eso, m-mí señor ─asimiló entre titubeos, hincada y ligeramente inclinada en forma de disculpa por su acción anterior.

─ ¿hmm? ¿y por qué no? ─abultó sus labios, pareciendo como si la mirara con lástima, y se acuclilló enfrente de jinsol, volviendo a tomarla por su barbilla─ ¿qué te ha hecho dudar?

jinsol apretó sus temblorosos labios─ las personas que se entregan a otras por dinero son kisaengs (se refiere a las que venden su cuerpo) mí señor, yo no soy eso ─miró a la de piel pálida con ojos renuentes─, ¿por qué querría usted eso de mí?

jungeun transformó su expresión lastimosa a una indescifrable para jinsol, manteniendo sus ojos más abiertos de lo normal, que con parsimonia*¹ fue cambiando a una más calmada.

─ usted es alguien quien me causa mucha curiosidad ─habló con serenidad─, y yo soy un hombre lleno de codicia y de naturaleza licenciosa ─bajó la mano que ubicaba en la barbilla opuesta, tomando las pequeñas manos (a comparación) de jinsol entre las suyas y ahora dedicándole una mirada que no se podía contrarrestar fácilmente─. quiero tenerla sólo para mí, y que no mire a ningún hombre más además de mí ─esgrimió*² contundentemente.

─ pero... mí señor...

─ puede darme todo de usted y hacerme más de sus hermosas costuras, o recrear en pintura lo que pasa dentro de éstas cuatro paredes ─la interrumpió, levantándose─.
»le daré el tiempo que necesite para pensar en mis palabras.

jinsol miró a jungeun con curiosidad y extrañeza, esperando unos segundos para poder levantarse de igual forma.
jungeun le dio la espalda y se acercó a su trono, pero no sé sentó en él.

─ tenga buenas noches, señorita jeong.

...

hubiera preferido no aclarar ninguna duda.
¿qué debería hacer? ninguna de las dos opciones me agrada, para nada.

─ ¿le entrego mí cuerpo o pinto el suyo en su lugar? ─me repetía una y otra vez, manteniendo una expresión angustiada en mí rostro mientras observaba el techo de mí habitación.

el príncipe se ve aún más hermoso de cerca.
su cabello está finamente peinado, al igual que su moño alto*³. su piel es muy blanca y limpia, prolija. sus ojos son incluso más intimidantes de lo que se ven desde la lejanía. sus facciones son muy delicadas, pero sin llegar a ser afeminadas; y gracias a que tomó mis manos, noté que las suyas son mucho más grandes y suaves a comparación.

mí señor es hermoso.

¿acaso me estará gustando demasiado su apariencia?

sacudí mí cabeza al pensar aquello. el joven príncipe es realmente hermoso, pero no debo permitirme sentir nada por él.

pero él dice que me desea...

el joven príncipe es hermoso y dice que me desea, pero no debo sentir nada por él y tampoco le entregaré algo que he estado guardando con cuidado por tanto tiempo.

voy a pintarlo hasta la saciedad*⁴, y así podré irme

...

abrí mis ojos con pesadez, sin embargo, me levanté y comencé a vestirme casi de inmediato.
según el señor minho me comentó mientras me llevaba el resto de mis ropas, el joven amo viajaría de nuevo, así que debía decirle sobre mí decisión de una vez antes de que eso sucediera.

terminé de amarrar la cinta de mí cabeza y salí de mí habitación, ésta vez con más calma. los sirvientes que pasaban me saludaban y yo les devolvía el saludo, pues todos me caían bastante bien.

─ ¡oh, espera, heejin-ah! ─exclamé después de saludarla, dándome cuenta de que no sabía en dónde estaba el joven amo.

─ ¿qué sucede, onni*⁵? ─me respondió, acercándose un poco.

─ ¿sabes en dónde se encuentra mí señor?

─ ¿el joven amo? en las mañanas siempre está en su sarangchae, puede encontrarlo allí ─ella sonrió con amabilidad y le devolví el gesto, haciendo una reverencia respetuosa.

─ gracias, eso era todo.

sin esperar mucho más, me encaminé hasta el sarangchae de su majestad a pasos agigantados. por alguna razón me sentía demasiado ansiosa, como si lo que le fuera a explayar*⁶ mí decisión.
disminuí la rapidez de mis pasos cuando ya me encontraba cerca de la entrada. al pasar el umbral, el joven maestro volteó su cabeza y me observó muy detalladamente, sonriendo sin mostrar su dentadura. yo me acerqué lentamente y me hinqué un poco, mirándolo decididamente y con condescendencia*⁷

─ pintaré para usted, mí señor.

( ৎ୭ )

aviso: a partir del siguiente cap. se prende el yesquero.

*parsimonia: calma o lentitud excesivas.

*esgrimir: utilizar algo material o inmaterial para el logro de algo.
»manejar la espada, el sable y otras armas blancas defendiéndose de los golpes del contrario y atacándolo.

*moño alto: el moño alto en la época de joseon era un significado de nobleza, virilidad y fertilidad entre los hombres. cuando a un noble se le cortaba el cabello, ésto se veía como un castigo por haber cometido alguna ofensa grave contra su autoridad mayor.

*saciedad: hartura, satisfacción excesiva de un deseo o necesidad. hasta no poder más, plena o excesivamente.

*onni: forma en que una mujer llama a otra mayor o de mayor rango.

*explayar: ensanchar, extender un sentimiento o un sentido, extenderse mucho al explicar algo, divertirse, distraerse, confiar los sentimientos íntimos a una persona para desahogarse.

*condescendencia: adaptación y acomodo a los gustos, apetencias y costumbres ajenas por benevolencia* o indolencia*.
*benevolencia: propiedad de la persona que es comprensiva y tolerante.
*indolencia: incapacidad de conmoverse o sentirse afectado por algo.

demasiados términos para un cap tan corto aaaaaaa.

aury. 🌱