Vol II □▪︎■▪︎□Capítulo 34■▪︎□▪︎■

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¡Alerta contenido sensible!
No soy lo mejor escribiendo gore. Pero es mejor avisar.

Masky te tenía agarrada de la cintura, tenía su cabeza sobre tu hombro mientras que te acariciaba el cabello. Pronto sentiste como algo iba resbalando desde tu cabeza a tu cara y cayó a tu ropa, viste y era sangre, tenía las manos bañadas en sangre, y sangre fresca. No creías que el fuerza capaz de matar a Toby, pero tomando en cuenta que Toby no estaba, era posible.

Tú: Masky...

Masky: Mi hermosa, ¿Dónde estabas? Te llevo buscando un largo rato querida mía.

Tú: Ehh... ¿Estás.. bien?

Masky: Como nunca lo he estado.

Masky se quitó el guante que tenía puesto y te lo coloco, tenías tanto miedo que apenas te podías mover, haciendo que logrará poner el guante rápidamente y sin complicaciones. Este mismo tenía sangre, demasiada sangre, lo cual te asustaba y preocupaba. Pasó su mano en tu cara para voltearte para verlo a él. Su máscara estaba rota, así que obervaste más a detalle lo que estaba roto de su máscara, no había nada más interesante, pero no podías despegar la mirada de sus ojos, eran tan hinoptizante.

Todo se acabó cuando un grito vino de abajo, era de Toby, claramente, no estaba ahí contigo, el debió haber gritado. Masky te sostuvo en sus brazos para no dejarte voltear o escapar, te estaba apretando tanto que apenas podías respirar y debías mover la cabeza a un lado. Toby detrás tuyo subió como pudo las escaleras, y te tomo de un solo jalón y arrebato de los brazos del enmascarado. La máscara de el estaba rota por la mitad, por tanto pudiste ver en el instante como una sonrisa se formó en su rostro, una sonrisa que te daba miedo, no sabías que pasaría, pero tenías miedo, querías escapar de ahi, aunque no sería buena idea.

Masky: De aquí no salen.

Y dicho eso, él de un salto ya estaba detrás de ustedes dos, para luego, perder el conocimiento durante un buen rato, no sabías que pasó, ni cuando paso, pero habías caído al suelo.

_ Con Liam _

El pequeño se encontraba leyendo tu diario, como si fuera una novela, todo lo que pasaba en esos relatos era tan... Interesante para el, que deseaba saber más del tema. Se quedó pensando un rato, cuando llegó su madre, quien le dijo que iría a descansar, esa sería una buena oportunidad para ir a buscarte a ti y a su otro padre sobre lo que vio, y decirles que tengan cuidado, y si tenía suerte, escapar del lugar, para vivir los tres una vida normal.

Tomo su chaleco y el diario que te pertenecía, lo guardo en una pequeña mochila y salió con cuidado y en silencio del lugar, se sabía el camino al bosque, y dentro de él todo era pan comido, vivió toda su actual vida ahí, no le sería difícil.

Mientras caminaba empezaba a imaginar una vida feliz con una vida normal en un lugar normal, podía imaginar ir a una escuela real, al volver a casa ver a algunos de sus dos padres, ya sean, Toby o tú, anhelaba eso, quería hacerle regalos en la escuela, y dárselos a sus padres cuando llegara, quería ir al parque y que jugarán en los juegos, deseaba poder ver las estrellas los tres juntos, y si su padre Masky pedía perdón por lo que hizo, los cuatro pudieran tener esa vida tan anhelada, solo eso deseaba, tener una vida como la de un niño. Pedir su ayuda para dejar de escuchar a personas que no existían o le querían hacer daño, hacer que su madre no sea mala con su mamá, su nueva madre debía ser mejor y todos serían felices. Él solo estaba imaginando un paraíso en el infierno, creando una linda mentira para tapar la fea y cruel realidad, cumplir sus deseos de manera imaginaria, y sentirlos por si no lograba cumplirlos.

La Protegida [Proxys y tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora