El sanador está bien [PAUSADA]

Cap 12: ¡Con todo lo que tengo, lo daré todo!

Sol Yihan:

Miré a Min Joohyuk con ojos desconcertados. Mis mejillas no me dolían, pero de alguna manera se sentía extraño. El guerrero continuó estirando mis mejillas y, con una expresión complicada, dijo: "Realmente eres..."

¿Qué hay de mí? Ahora que lo miro, varias emociones parecieron pasar por el rostro de Min Joohyuk. Todo por su cuenta. Agarré su muñeca y arrastré hacia abajo su gigantesca mano. Miró mis dedos delgados que cubrían su muñeca y dócilmente me dejó apartar su mano.

En lugar de prestarle más atención, me volví hacia Song Ha-gyeon: "Ha-gyeon hyung, gracias. Pero, estoy realmente bien en este momento".

"...Yo soy el... agradecido. Por curarme", dijo en voz baja antes de colocar el frasco de medicina en la mesita de noche. Luego, colocando su mano sobre mi cabeza, murmuró: "¿Nos vamos?"

Min Joohyuk respondió con mucho entusiasmo: "¡Sí, Hyung-nim! Todos deberían estar en el comedor ahora.

"Mmm".

"Estaré justo en frente de ti. Por favor, sal a tu propio tiempo".

Song Ha-gyeon asintió levemente con la cabeza; su cabello, suelto atado a un lado, susurraba. Aunque salió el brillante sol de la mañana, el lugar aún estaba oscuro.

Si van a bajar al primer piso, entonces debería levantarme también. Cuando me di la vuelta y me moví para ponerme de pie, Song Ha-gyeon me agarró firmemente de la muñeca. "¿Ha-gyeon hyung...? ¿Qué es?"

"... ¿Quieres que te lleve?" Su tono era tan plano.

Por lo tanto, no entendí de inmediato lo que quería decir. Tomó un momento para que sus palabras atravesaran mi cerebro. ¿Quería darme un paseo a cuestas? ¿Por qué?

Después de ver mi expresión, el guerrero me soltó suavemente. Luego, caminó hacia la cama frente a la mía; cuando regresó, sus manos sostenían pantuflas blancas. Arrodillado sobre una rodilla, Song Ha-gyeon se acercó a mi pierna.

¡Espera un minuto!

Retiré mis piernas sobre el colchón y hablé a toda prisa: "No, hyung. Puedo hacerlo yo solo."

"Lo sé." A pesar de que dijo eso, todavía se sentó obstinadamente allí. Ni siquiera hubo un ligero temblor cuando me miró. No mostró signos de ponerse de pie.

Eventualmente, estiré mi pierna con cautela hacia el Guerrero. Song Ha-gyeon recibió suavemente mi tobillo; sus manos estaban tan calientes. Tal vez solo me sentía así desde que me bajó la fiebre y ahora siento la ausencia de calor.

Lentamente tiró de mis piernas y se puso las pantuflas. Luego, se puso de pie y extendió su mano.

"...Muchas gracias." murmuré. Cuando sostuve su mano, Song Ha-gyeon me levantó hábilmente. Aunque no parecía que pusiera mucha fuerza en sus movimientos, de repente me levantaron de la cama.

Podía sentir el toque cálido de las pantuflas en mis pies, el piso se sentía como si estuviera pisando una nube.

Salimos juntos de la habitación. Min Joohyuk estaba afuera, apoyado en la pared al lado de la puerta. Revolvió mi cabello antes de tomar la iniciativa una vez más y descender las escaleras. Lo seguí lentamente.

Mi mente se sentía un poco complicada. Min Joohyuk... Song Ha-gyeon también... ¿Era esto normal? ¿Es natural que alguien preste tanta atención a otro?

No tenía ni idea. Nunca he tenido un contacto humano adecuado en el templo, así que no tenía ni idea.

Sus miradas atentas eran tan pesadas. La atención era tan desconocida, tan extraña. Si ignorarme no era la norma, entonces por qué me han ignorado... hasta ahora...