Todo lo contrario a mi - Iker Casillas y tú

21: Día raro, completamente

Casillas pov's:

Me desperté en el hospital, como no. Me desperté como me dormí, agarrando la mano de Juli y sentado.

Me rompe saber que ni se ha movido ni se moverá por el momento...

Evitando pensar más solté su suave mano, me preparé y me fui al entrenamiento.

Pero antes de salir, me acerqué a mi Juli, la di un beso en la mano y me fui algo triste y desanimado.

¿Y si no...?

. . .

Llegué al campo y había mucho silencio. Nos reunimos todos y el míster comenzó a hablar.

-Buenos días muchachos, si están desanimados lo entiendo, esto fue un golpe fuerte tanto para Xavi como para los demás, tengan o no vínculo con aquella mujer es imposible no sentir nada. Pero no sé si os dijeron que en la vida- miró a todos. -Hay que seguirla sea como sea, ¿me escucharon?

Todos asentimos menos Xavi.

-Cierto, pero ahora una parte de mí está en coma- añadió Xavi serio, con ojeras y ojos cansados.

Andrés le miró con tristeza en el alma y todos posamos nuestras miradas en Xavi, este solo miraba al míster.

-Sea como sea dije Xavier, ¿quieres ganar la copa?- respondió Del Bosque.

-No- respondió secamente.

Todos nos quedamos en silencio incluso el míster.

Andrés miró a Xavi y le abrazó con un brazo por atrás. Xavi solamente asintió y salió del círculo. Andrés le acogió la cabeza y el catalán se dejó, hundiendo todo su cuerpo en el manchego, cansado y roto.

Los demás nos separamos y Pepe, Víctor y yo fuimos a la portería.

-Bueno, bueno, pero animarse más joder, que si no así no vamos a ningún lado- dijo Pepe con su buen humor.

Sonreí de lado al escuchar a Pepe. Él siempre fue un personaje y perfectamente te podría alegrar en unos minutos, o por lo menos haciendo que olvides lo demás.

Miré a Víctor y noté que ya se iba soltando y cogiendo confianza, ofreciendo una sonrisa.

-Ya te vas soltando eh chavalin- dijo Pepe dándole pequeños toques en la espalda.

-Como para no soltarme con dos madrileños rodeandome- respondió, resaltando de dónde eramos.

-Gracias hombre- respondió Pepe guiñando un ojo.

Yo solamente sonreí bien.

Miré a los alrededores y vi que estaban todos muy desanimados y sin hacer casi nada. Vicente observando con cara nula.

-¡Venga hombre! ¡a trabajar y a entrenar! ¡a ganar la copa por vuestras personas especiales!- añadí mientras gritaba y me colocaba los guantes.

Asintieron y se pusieron a correr, estirar y entrenar, algo obligados, jaja.

Les di consejos a Pepe y a Víctor y los tomaron en cuenta practicando con compañeros que tiraban penaltis.

Nos tomamos una charla y nos comenzamos a reír un rato los tres. A lo que llamamos la atención de Andrés.

-¡Hey! ¿no invitais a las risas?- añadió llegando con Xavi detrás.

Ellos comenzaron hablar y yo me fijé en Xavi, el cual estaba mirando al suelo con la pelota pasandosela de pie a pie, como un niño chico.

Me acerqué a él y le quité la pelota. Aquello hizo que elevara la cabeza y me mirara.

-Puedes crecer un poquito más, enanito- le sonreí de oreja a oreja y le abracé.