El chico de al lado

5. I Wanna Be Yours

-Pues parece que te quedas-. Dijo Pablo a mi lado, lo miré de frente y no le podía crecer más la sonrisa, ¿Tan bien le caí? Si solo nos conocemos de unas horas. Reí cuando empezó a dar unos saltitos.

-¿Tanta ilusión te hace?-. Se paró en seco y me miró con un semblante serio.

-Sí, sabes que ahora que somos "amigos" no te voy a dejar en paz, me vuelvo un poco pesado, me caíste bien encima, soy muy selectivo y a parte me hace ilusión, porque mis padres nunca dejan que alguien se quede a cenar, dormir o algo así, por eso Daniel es tan solitario, al no salir por el sol pues no puede socializar mucho y encima mis padres no dejan a casi nadie a entrar, ahora que lo pienso, pobre Daniel tiene que tener un vida sexual un poco... - Me mira otra vez con una sonrisa y yo me quedo inmóvil, tanta información tan rápido, espera ¿Por qué habló sobre la vida sexual de Daniel? ¿Cuándo cambiamos de tema? ¿Es un vampiro? Bueno da igual, me gusta más un Pablo hablador.

-Gracias ¿supongo?-. Dije subiendo los hombros y el se rio.

-Venga vamos a mi cuarto-. Me coge del brazo para subir las escaleras, pero la voz de la madre nos interrumpe el paso.

-¡Avisen a Daniel de que en quince minutos comemos, y bajen ustedes también! -.

-¡Vale!-. Grita con el mismo tono gritón que su madre. Y tras mirarme un momento, retomamos el paso.

En la planta de arriba pasamos cerca del cuarto de su hermano de donde salía una canción en inglés, pude reconocerla al instante, Call out my name, de The Weeknd, me pareció raro, esa canción me parece demasiado sensual por el ritmo de la música, ¿Daniel escuchaba este tipo de música? Pero de verdad cada vez me sorprende más.

No me había dado cuenta de que Pablo ya no estaba a mi lado y que yo me encontraba en la puerta de Daniel. No sé porque pero tenía la necesidad de entrar, así que lo hice. Cuando toqué la puerta para entrar nadie me contestó, toqué otra vez y me sorprendí cuando Daniel estaba frente a mí con expresión seria.

-Hola, mira...-.

-Pasa-. Me jaló del brazo entrándome bruscamente al cuarto y cerrando la puerta tras de mí.

-Oye podrías haberme dicho solo que pasase, yo tengo piernas, puedo caminar-. Lo miro mientras me paso la mano por el brazo por donde me agarró.

-Lo siento, a veces no controlo la fuerza-. No sé si tenía doble sentido, pero yo sentí como me ardían un poco las mejillas.

-No pasa nada-.

-¿Bueno para que querías hablarme? Y antes de que preguntes, te entré porque no me gusta hablar en el pasillo, hay gente muy cotilla por aquí-. Me reí porque sabía que se refería a Pablo. Y sí que le iba a preguntar por eso...

- Pues la verdad no sé porque estoy aquí, creo que fue la canción-. Deja de leer el libro para mirarme con una ceja elevada.

-¿Por la canción?-. Se ríe por lo bajo. Pero no le presté mucha atención a su risa, me fijé en los ojos tan azules y en las pequitas de la nariz.

-Sí, la canción que sonaba. No sé, estaba subiendo con Pablo para ir a su cuarto y escuché esa canción, que me encanta, y pensé que raro, ¿a Daniel le gusta esa canción? No te juzgo, a mi me gusta, pero me parece bastante...

-Sensual-. Termina por mí

-Sí, exacto y creo que no me di cuenta a donde iba, ni siquiera me di cuenta de que Pablo ya no estaba a mi lado, solo sé que acabó la canción y que estaba en tu puerta, y la toqué. Bueno y aquí estoy, curioso ¿verdad?-. Me miró confuso.

Silencio.

Cuando de repente sonó otra canción. I Wanna Be Yours , de Arctic Monkeys.

-Bueno, la música te trajo aquí, así que la música hará que te quedes, al menos lo que queda de la canción-. Se levantó dejando el libro a un lado, sin dejar de mirarme y me extendió una mano. ¿Quería bailar? Le di mi mano un poco extrañada por toda la situación.

-Bailemos-. Esto cada vez se está volviendo más raro, pero por alguna razón mis piernas no se mueven y corren fuera de la habitación.

Puso mis manos alrededor de su cuello y sus manos las puso en mi cintura. Me pegó a él y yo pose mi cabeza en su cuello. Nos empezamos a balancear tranquilamente. Era demasiado raro, pero no incomodo.

-Maybe I just wanna be yours-. La voz ronca fue tan repentina que el corazón me dio un respingo al igual que yo, cosa que hizo que se riera de mí.

-I wanna be yours-. Canté levantando la cabeza para mirarlo, pude notar que se puso tenso enseguida y yo me reí de él ahora.

-I wanna be yours-. Me cantó el sin dejar de mirarme. Nos balanceamos un poco más hasta que se acabó la canción. Nos separamos y nos miramos más intensamente.

Un carraspeo. Me giré a la puerta de donde provenía el sonido, Pablo y me estaba sonriendo de manera extraña.

-Mmm... sorry interrumpir este momento tan bonito, tan traumante y tan extraño,  pero mamá dice que bajemos a comer-. No me a quitado la mirada de encima. Dirijo una mirada rápida a Daniel y la devuelvo a Pablo.

-Sí, voy-. Paso por el lado de Pablo y bajo directamente a la cocina.

***

Me estoy riendo hasta yo jajajajaj aii dios.