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CAPITULO I

Desde bien pequeñito, mi papá me llevaba a clases de danza durante todo el año todos los años, con el único propósito de salir a bailar una noche con alguien desconocido. Si, habéis leído bien, todo un año de danza se solía resumir en una noche. La noche de los mil y un cadáveres.

La fiesta era generalmente conocida en mi ciudad. Se celebraba la noche en la que mil hombres del equipo rival fallecieron en la guerra. Sin embargo media hora de esta fiesta, el momento del baile lento, es usada para honrar a un chico que falleció para poder ganar en la guerra. Ya sabéis, leyendas urbanas. La fiesta era en un antiguo recinto de mármol, parecido a lo templos griegos en el que fue cometido el asesinato del joven chico. Casi toda la ciudad está reunida. Pero suerte encontrando a algún amigo tuyo porque todos tienen que ir enmascarados, hasta los bebes con menos de dos meses de vida deben llevar una mascara puesta para hacer la noche mas memorable, aunque algunos digan que la mascara se lleva porque el atroz asesinato fue cometido enmascarados. Yo no me creo nada, pero nunca está de mas reunirse a pasar la noche.

En el instituto todo el mundo habla de esa noche especial y sagrada, sin duda es mi fiesta favorita.

–¿Sabes que Tweek Tweak, el niño que falleció aquella noche, tenia nuestra edad?– habló detrás de mi la voz de Token Black, mi mejor amigo. O al menos uno de ellos –, es sin lugar a dudas una atrocidad, pobrecito.

Como habéis visto, Token es muy fan de esta fiesta. El cree que es de psicópatas celebrar de una manera tan alegre la muerte de un joven.

–No solo eso... –escuche una segunda voz, la reconocible voz de Clyde Donovan, mi otro mejor amigo –¡si no que era guapísimo! ¿Le has visto esa carita de niño mono que tenia? Por que soy hetero, si no... –hubo un amargo silencio en el que ambos miramos con curiosidad al moreno para ver que otro argumento estúpido y homosexual tenia que decir –quiero decir... –otro silencio que si para Token y para mi era gracioso, para Donovan era extremadamente incomodo –¡Craig es gay!

Mierda.

Respondí con mi mejor estrategia para estos casos, hice un ademan de insulto con mi mano al que a Token le parecía gracioso y a Clyde insultante.

–Sois muy infantiles– hablo el de tez oscura –y ademas, Craig si es gay.

–Joder ¿otra vez con eso? Sois mas idiotas –bueno, esos son mis amigos. Lo peor es que están acertando en cada uno de sus vulgares comentarios hacia mi.

También acertaba Clyde cuando decía que Tweek Tweak, el niño que falleció era bello, al menos eso vi en la tenue y borrosa foto que Donovan me había regalado con una notita que decía "para hacerte pajas delante de un bellezon"

Si os preguntáis de donde saco la foto Donovan (Pregunta que yo le hice cuando la foto me fue entregada), la saco de la familia Tweak. La familia Tweak estaba compuesta por una mujer y un hombre y, hace 75 años, el chico que falleció. Yo no creo que el fallecimiento del mas joven de la familia Tweak ayudase a matar a mil hombres, pero si que hubo un chico que murió. Si que murieron mil hombres. Pero no creo que eso tenga algo que ver con la familia Tweak y mucho menos con su hijo.

Después de terminar de guardar mis libros de historia y sacar los de matemáticas de mi taquilla, camine, seguido de mis amigos, al aula 13. Allí tendríamos clase con el Sr Garrison. Que por fin había dejado la política y el director PC le había contratado de nuevo con la condición de que fuera mas respetuoso y que tendría que darnos todas las asignaturas durante todos los años a nuestra clase. Garrison acepto sin problemas la primera condición. La segunda le costo ya que ¿Quien quiere darle clase todos los días a todas horas a Eric Cartman? A mi me imponen ese castigo y dimito.

El baile de los mil y un cadáveresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora