My first love (Chaelisa G!P)

Capítulo 02. ✿⁠

Cinco años después.

-¿Y como se sintió... Eso?.-Pregunto la rubia tímida con sus mejillas ruborizadas y lisa rio divertida mirando hacía el techo.

-¿Tener sexo con una chica? Fue... Increíble, deberías intentarlo.-Respondió lisa acostada en su cama con su amiga a su lado, sabiendo que tal respuesta indecorosa estaría matando de la vergüenza a la rubia.

-¡Lisa!.-Chillo rosé en respuesta tapando su rostro con sus manos y lisa no pudo evitar reír burlonamente como siempre lo hacía, la neozelandesa penso que tan útil sería que supiera teletransportarse en esos momentos para huir de esa conversación con lisa, que cabe destacar, ella misma empezó.

-¿Que? No dije nada malo, solo dije que... Tal vez te gusten las chicas y deberías intentarlo...-Dijo pensando en que eso no le costó decírselo pero que sería muy extraño ver a su rosie con alguien más que no sea ella.

-Jamas haré eso...-Murmuro la rubia descubriendo su cara y sentandose en la cama.

-¿Tener sexo? Creó que en algún momento de tu vida la harás rosie...-Dijo manoban también sentandose y acercándose a ella para abrazarla por la cintura y poner su barbilla en el hombro de esta.

La rubia respiro profundo y solto un largo suspiró, lo que siempre hacía cuando era atacada por los mimos de lisa, pues podría recibir cariño de cualquiera, pero con lisa siempre era diferente, y seguía sin saber por qué, solo sabía que eso le encantaba demasiado y no podía vivir sin el amor de la tailandesa.

-No se si me gustan las... Chicas... Así que no quiero hablar de eso, no es fácil para mí, tu solo un día despertaste y ya sabías que te gustaba... Pero yo.. no logro descifrarlo aún...-Dijo la rubia con desesperación y tristeza en su voz, lisa no la podía ver directamente, pero solo necesitaba escucharla hablar para saber que ese tema la preocupaba de sobremanera y odiaba verla así, pues a pesar de que siempre la metía en problemas, también amaba ayudarla a resolver los suyos.

-Hey rosie... Elija lo que elijas siempre estaré aquí contigo, siempre, y tus padres te amarán, estoy segura, eres la mejor hija del mundo, y la mejor amiga, en realidad eres la mejor todo.-Dijo la más alta dejando un beso en su mejilla y por ese instante rosé sabía que todo iba a estar bien si lisa nunca soltaba su mano, porque todo dependía de si manoban estaba para sostenerla si llegaba a caer, y no solo metafóricamente...

Sonrió y cerró los ojos cuando lisa se fue hacía atrás acostándose de nuevo y llevandosela consigo.

Al instante se acomodo mejor en los brazos de la pelinegra sintiendo su calidez y ese típico olor a fresas de lisa, realmente amaba a su mejor amiga, incluso temía amarla más que a cualquier persona del mundo.

-Gracias... Lili, por ser mi amiga...-Dijo escondida en el cuello de lisa y sintió como a esta se le erizo la piel y luego rio.

-No hables ahí rosie, me das cosquillas, y te amo, ahora di que también me amas.-Dijo lisa cerrando ya sus ojos para dormír abrazada a la cintura de la rubia, quién sonrió sintiéndose demásiado feliz y volvió hablar.

-No lo digo porque tú me lo pediste, también te amo tonta...-Dijo escuchando las risas de lisa por las cosquillas provocadas y así se quedó dormida, con las caricias de manoban en su espalda y su risa como último sonido por escuchar.