VAMPIRE ACADEMY - LAST SACRIFICE (fanfic)

Capitulo 81.

Alguien golpeo la puerta despertándome de mi sueño sin sueños

- Rose, es hora - grito Lissa

Inmediatamente recordé que hoy sería la mejor noche de toda mi vida, hoy seria la mujer más feliz del mundo...

Habían pasado ya casi dos meses desde que iniciamos nuestras vacaciones, así que dentro de unos días volvería al deber, y a afrontar mi destino... muerte...

No, grite mentalmente, no pienses en eso Rose

Brinque de la cama y corrí hacia la puerta. En ese momento me di cuenta que Dimitri no estaba en la habitación, lo cual por una parte me agrado, pues no ahora estaba envuelta en nervios y no ayudaba que no hubiera dormido muy bien, pues como despedida de soltera habíamos estado jugando billar y viendo películas hasta altas horas de la madrugada, pero aun así, mi imagen estaba perfecta... gracias al poder de Lissa

- Ya voy - grite de vuelta envolviéndome en una bata

Abrí la puerta y allí estaban ellas, tan radiantes como siempre.

Ellas me dieron una sonrisa, y se encerraron en mi habitación, preparándome para la mejor noche de mi vida.

Lissa y Victoria tomaron posición de mi cara y mi cabello. Me relaje en la silla y las deje trabajar haciendo todo lo que me ordenaran. Lissa utilizó unas sombras claras para mis ojos y aplico varias capas de pestañina resaltándolos. Mis labios estaban de un rosa oscuro, que iba a juego con mis ojos. Un rubor iba en mis mejillas y grandes pendientes plateados colgaban de mis oídos.

Victoria hizo un gran trabajo con mi cabello. Lo de jugo suelto y salvaje, pero un poco alisado. Después trenzo la parte superior en forma de diadema y en medio de la trenza acomodo unas pequeñas perlas y rosas blancas.

Lentamente mi mente empezó a divagar en el espesor que habían hechos mi nervios de mi autocontrol, y termine haciéndome la pregunta más estúpida y al mismo tiempo tan difícil de contestar ¿Qué es el amor?

Recordé todo lo que había sentido en mi tiempo con Dimitri y después de unos minutos pude dar una respuesta coherente:

El amor es confianza, responsabilidad, sopesar tus opciones y sentimientos, vivir el resto de tu vida en consonancia con ellos y sobre todo, no hacer daño a la persona amada... si quizás eso era el amor aunque... no definitivamente no. Debía multiplicar todo aquello por lo infinito, y llevarlo hasta el fin de la eternidad y a penas... a penas medio tendría una definición de aquello

- Está listo - dijo Lissa trayéndome devuelta a la realidad

Sonreí ante la imagen que mostraba el espejo. Tenía que admitir que hoy era una Rose hermosa. Deslice la mano por medio de mi cabello, estaba suave y olía delicioso, embriagador.

- Gracias - les dije

Lissa sonrío y Victoria dijo

- No hay de que Rose, solo trata de no despeinarte

Deje caer la mano de mi cabello

- Vale

Victoria rio

- Bien, es hora del vestido - dijo Lissa

Abrió una caja y me lo enseño. Mi boca involuntariamente se abrió, pero después de una sacudida pude contemplarlo perfectamente... con la boca cerrada.

Era largo y de color blanco plata. Estrecho hasta la cintura. No era muy ancho, como el vestido de una quinceañera, no, era un poco suelto desde mis caderas. Era cuello bandeja con mangas finas y el escote de la parte trasera llegaba hasta la parte baja de la espalda.