Matilda

Capitulo 3 Matilda se enamora

Era tarde y la noche estaba surgiendo rápidamente, pero el mayor temor de Matilda era que la tormenta avanzará justo en ese momento,dónde todo estaba resultando terrible.La situación se puso más tensa, desde su habitación que compartía con sus hermanas, decidió no intervenir en la cruda discusión. Su padre había tenido un mal día y eso traía ingratas consecuencias para toda la familia.

_No tengas miedo, papá tendrá sus razones para enojarse con mamá.

_Paulina!_ enfureció Mati con tal increíble respuesta.

_No hables alto, quiero escuchar que sucede_respondio Paulina con gestos de enojo.

_Chicas esto ya debería ser normal para nosotras, así que déjenme leer ,tengo prueba de literatura en dos días _gruño Sabina,la menor de las tres hermanas.

Los gritos se escuchaban en las casas linderas, esto causaba mucha vergüenza a Matilda, las miradas ajenas eran muy crueles, cómo si alguien les importara sobre su vida.Lo más penoso era percatarse de que sus hermanas habían naturalizado la violencia doméstica.Por un instante todo parecía un horrible sueño, Matilda se asomó por la ventana y vio que la tormenta aparecía de a poco con toda su furia, al igual que su padre.Esto no podía ser tan malo, cómo haría para huir en caso de que todo se fuera de las manos, ya que muchas veces no le había quedado otra opción que dispararse como flecha hacia la casa de su tía Mimi, la única persona amable que había conocido desde pequeña.

_Mati no se si hoy vendré temprano, seguramente me quedaré en lo de Madison_le explicó su amiga Lola, mientras observaba que estaba en otro mundo

_Matiiii,te estoy hablando.

Eran esos momentos en que la joven quedaba detenida y absorta en sus pensamientos, parecía que le revolvía el estómago cada vez que se acordaba de su pasado .Y ahí estaba nuevamente sola, pues en todo su derecho Lola podría ir a la casa de su nueva amiga y compañera de universidad, y Yael últimamente era como invisible en la casa, nunca estaba, su novio francés ocupaba la mayor parte de su tiempo.En cuánto Isabel, cada vez menos venía de visitas, solo la veía en el trabajo.Asique Matilda estaba en silencio,muchas veces tanta quietud y soledad la abrumaban que ni siquiera podía concentrarse en sus estudios.
Decidió ponerse los auriculares y escuchar música despacio, mientras sus pensamientos de su pasado regresaban ensañados en lastimarla una y otra vez.Se recostó en su cama, coloco su almohada un poco más arriba, y su mirada se dirigía hacia el techo blanco con algunas manchas de humedad que ya se habían convertido en sus amigas. La noche parecía interminable y el frío la convertía en temible como la soledad.Casi sin quererlo la atrapó el amanecer, todavía con su almohada en la misma posición y los auriculares perdidos entre las sábanas, todo yacía tal cual la noche.Inmediatamente sonó la alarma del celular,era la hora de levantarse y continuar, si , de seguir intentando a pesar de todo.
Abrigada con su campera color verde oscuro y en su interior piel sintética blanca ,era ideal para hacer frente a la dura helada. Llegó el colectivo y empezó su viaje al restaurante, su semblante no era de lo mejor y mucho menos su espalda luego de dormir retorcida.Con los auriculares pequeños en sus oídos dió lugar a la música, compañera de momentos, de situaciones , de trayectos, de tristezas y alegrías.
En eso recibió un mensaje de Isabela.
_Buenos días mi querida Matii👋👋☺️

_Hola 👋 Isaaa te extraño 😢

_Lo siento pero tuve que pedir modificar mi horario por un tiempo, la vida en pareja no es tan fácil para congeniar horarios.

_Oki amiga😘 sabés que contas conmigo infinitamente.

_Lo sé 😊❤️❤️❤️❤️❤️ gracias.James es muy amable y súper considerado.Lo amo mucho.

_Mejor sino se la verá conmigo😡

_Estoy bien, te lo prometo 😘.

Volvió a subir el volumen de sus auriculares, cerró sus ojos y se acurrucó un poquito hasta que llegó a la parada indicada. Camino algunos metros y se sintió más aliviada, tal vez ese James sería bueno, sino su amiga se lo diría.
No es que Matilda no tenía motivos para tener un mal concepto sobre ese hombre, y era bastante poco usual que hasta el momento no viera a su casi hermana llorando porque la engañaba con cualquiera que se le cruzara.Rogaba que su intuición fallara está vez .Tal vez James había madurado.
Esa mañana no entró mucha gente al lugar, entonces mientras limpiaba la enorme cocina su cabeza la llevo a Vicente, su primer novio, por suerte estaba muy lejos, y el dolor ya no era tan fuerte, se había ido debilitando con el paso del tiempo.Matilda había llorado muchísimo por ese joven, lágrimas derramadas en vano, porque realmente no la merecía.Decidio hacerlo desaparecer de su mente y de repente se percató que limpiaba la cocina con más fuerza como desquitandose con el artefacto toda su rabia.

_Hola

Escucho Matilda mientras ahora se desquitaba limpiando ollas y sartenes.Dio medio giro y solo eso valio para observar esa cálida figura, radiante de luz, ojos color café y cabello dorado al sol, blancura increíble como la nieve que había comenzado a caer desde hace solo minutos.Dios tenía detrás de ella al chico más angelical que había visto jamás, ni siquiera Vicente le llegaba a los talones con su belleza.
_Hola !

_Todo bien?

_Si limpiando .

Su corazón quedó eclipsado, su garganta casi seca sin poder emitir demasiadas palabras, pero su visión atravesando cada centímetro de esa figura atlética y descomunal.

_Estare un tiempo a cargo del negocio, cualquier inconveniente por favor me informas, de acuerdo?_sonrio .

_Bueno.

Si bien Matilda solía hablar hasta más no poder, en ese instante enmudeció.
Era mucho más alto que ella, como un metro setenta y pico, sus ojos pequeños y su media sonrisa, su piel cubierta de pecas intrepidas lo convertía en un sueño, llevaba puesto ropa deportiva nuevamente, seguro que haría deportes ,pensaba Matilda mientras sus ojos hacían una radiografía completa.Penso que tal vez era una especie de holograma del hombre que siempre había deseado conocer, al retirarse de la cocina, la joven giro hacia las sartenes para continuar luchando con la esponja , pero su corazón ❤️ quería gritar de emoción, su nuevo jefecito era el menú sorpresa del lugar, la frutilla del postre que Matilda desearía tener.En eso decidió mirar por la puerta entreabierta, y si , no podía ser de otra forma, era muy sexi, tremendamente enorme y fuerte.

_eyyyyy

Matilda dió un salto del susto, pues su compañera la encontró infraganti.

_diosse vas a matarme del susto.Que pasa?

_Viste quien será nuestro nuevo jefe?_pregunto Verónica, la cocinera.

_Si, Nicholas_respondio mientras terminaba con su tarea de limpieza.

_mmm lo conocías?

_Si, es que trabajo en su casa, es decir, le enseño idioma a su hermana más chiquita.

Verónica la miró sorprendida.Luego se dió cuenta que Matilda Lucia extraña esa mañana.

_Te pasa algo?, Sabes que puedes confiar en mi.

_Ok.No dormí bien, otra vez ciertos recuerdos invadieron mi cabeza, mierda estoy harta de eso .

_Te entiendo, todos tenemos algo oscuro en nuestra vida, vos sabés porque te lo digo.

_si, pero deseo ser feliz, no sentirme más...

Un nudo en la garganta interrumpió la respuesta de Matilda, se notaba agobiada y compungida.Veronica le preparo un te calentito, sabia que Mati era una buena chica y que estaba muy sola.
La mañana se hizo eterna, poca gente había entrado al resto, entonces decidió limpiar los vidrios.En ese instante se acercó Nicholas para charlar con Matilda.

_Todo bien? _se paro cerca de la joven, mientras ésta detuvo su limpieza, un poco exhausta.

_Porque no descansas?_ sonrió.

_ok.

_Y cómo está mi hermana con sus estudios?

_Super bien, es muy inteligente y tiene muchas ganas de aprender._Explico nerviosa, lo tenía muy cerca suyo y era muy hermoso, realmente debía esforzarse para que no se diera cuenta de que le encantaba.

_Me gustaría conocer tu país, he viajado mucho porque mi madre siempre nos llevó junto a ella cuando debía trabajar lejos de casa.

_Que bueno, es una buena madre seguramente.Se debe sentir lindo que alguien te proteja.

Nicholas noto cierta melancolía en la joven, sintió que tal vez Matilda no tenía madre y realmente le hacía mal hablar sobre eso.

_Bueno no quiero ponerte triste.

_No, no._solto una sonrisa tímida.

En ese instante hubo una conexión fuerte entre ambos, una mirada penetrante los tomó por sorpresa, haciendo que Matilda sintiera cosquillas en su panza.Duro segundos, pero fue suficiente para darse cuenta que se había enamorado.