Los villanos no son malos (Mechoa)

Peleas y Bailes

El descanso pasaría eventualmente, los chicos se sintieron bastante recuperados y fueron capaces de pelear con más comodidad y mucho mejor al estar acompañados al momento de eliminar a las sombras que poco a poco se volvían un poco más fuertes de lo que esperaban, además de que aquella zona en donde peleaban cada día tomaba mucho más territorio y esta vez no desaparecía.

Scaloni y Aimar les habían informado que aquella obscuridad que se empezaba a expandir era ya una señal del control que poseía el sol y la luna en su ciudad, lo cual empezaba a confirmar la profecía de aquel pergamino, aun no del todo descubierto ya que faltaba el nombre o la descripción de aquel que seria elegido para derrotar a la figura aun no identificada que dominaría la luz de aquel lugar.

La pelea estaba apunto de acabar con la victoria de varios y la derrota de otros, Ramos había quedado fuera junto a muchos otros héroes y villanos como lo eran Suarez, Cris y Ney que ahora solo podían observar aquel papel que ahora poseían sus compañeros, Modric le acompañó después de unos minutos en los que una sombra lo había lanzado fuera del campo dejándolo fuera y así la luna impidiendo su entrada eventualmente.

Modric, al ya no poder ingresar, una voz se hizo presente en el campo mientras las sombras se desvanecían; solo quedaban dos fases, la penúltima era la decisiva, quedaban héroes mexicanos y villanos argentinos en la zona. Y con ello una orden se dio.

Solo once serán los elegidos, cambios podrán hacerse en medio de la batalla, pero solo de uno de los grupos, por eso mismo: Los villanos y héroes deberán enfrentarse en la penúltima batalla, para que sea justo la luz y la obscuridad serán un solo campo. La decisión está dicha y tomada. Héroes o villanos será, pero no ambos, no desobedezcan a la voluntad de sus astros y obedezcan, peleen por la dignidad e integridad.

Guillermo rápidamente volteó a ver a Lionel, el mexicano tenia el ceño fruncido mientras el argentino se veía de lo más relajado pero serio, no le sonrió de manera arrogante como ya se había acostumbrado. Leo se acercó suavemente a Guillermo y colocó uno de los mechones rizados.

−Voy a ganar Guille −Dijo sonriendo de esa manera burlona y determinante que tanto le gustaba a Guillermo quien solo pudo enojarse ante la reacción del argentino ante aquella orden.

Antes de seguir con la conversación los paparazis no tardaron en aparecer y separarlos para hacerles preguntas una más irritante que la otra para el morocho.

Después de acabar con las entrevistas y llegar a casa los villanos y héroes se dispusieron a intentar aligerar la situación ignorando un poco todo lo que deberían hacer ahora; pero Cris no dejaría que se apartara dicho tema.

−Vamos a hablar de ello, tarde o temprano debemos discutirlo y más si la pelea se aproxima −Soltó Cris en medio de la sala haciendo que todos guardaran silencio. Hasta que Leo decidió hablar.

−No hay mucho por discutir, era claro que pasaría esto en algún momento, no podíamos competir todos y eso es lo que debemos afrontar, nos pelearemos en el campo de batalla por un fin, además... tengo claro que quiero ganar, no por el merito de ser el mejor −Leo llevó su vista a donde Guillermo se encontraba expectante ante la situación −Prefiero que si algo malo llegara a pasar me pasase a mí

−Además nos desenvolvemos más en el ambiente de las sombras −Aportó Ota

−¿Entonces piensas que no somos capaces de terminar con esto? −Guardado soltó la pregunta al aire mientras la tensión aumentaba.

−No es eso, pero casi se desmallan al ver sangre en sus manos −Dijo Julián sin alzar mucho la voz.

−Por algo aprendimos a hacerlo hace semanas ya −Contraatacó Diego.