Sentimientos Confusos - LadyNoir / MariChat × Felinette [Fanfic] 🐞

9.

Capítulo narrado por Marinette.

-Ya vuelvo

Félix caminó hacia las cabañas mientras yo veía como el atardecer se ponía frente a nosotros. Me agache para jugar con el agua en la orilla de la playa mientras lo esperaba.

-Que fría -Susurre

-Marinette -Mire hacia mi derecha para ver Adrien. -Perdón, ¿estas ocupada?

-Espero a Félix... ¿sucede algo?

-Bueno -El viento chocó contra nosotros. -No pude agradecerte por hablar con mi padre. -Sonrió -Gracias...

-Ah, yo... hice lo que sentía. -Le devolví la sonrisa. -Hubiera sido muy triste que te perdieras este viaje.

-Toma -Me extendió su mano. -Es un anillo de amistad. -Observé y acerqué mi mano. -Tiene un pequeño rubí en el medio. -Me acerque a el. -Lo compre en una pequeña joyería pensando en ti.

Lo mire con las mejillas algo rojas. Estando tan cerca suyo me sentí hipnotizada por sus ojos verdes.

-No tenias que hacerlo -Susurre y me levante. -No puedo aceptarlo.

-¿Por que? -Me observo con tristeza. -¿no te gusta? Yo no se mucho de estas cosas pero...

Négue con la cabeza y lo pensé antes de decirle.

-Yo... y Félix... nosotros... tu primo... el me... -Las palabras no salían de mis labios.

-Lo se -Sonrió -Sé lo que sucede entre Félix y tu... -Miro hacia el anillo. -No quiero que confundas mis intenciones Marinette. -Se veía preocupación en su rostro. -Solo eres y siempre serás una amiga para mi. -Me sonrió -Nunca seré un problema entre tu y mi primo. Solo quiero ser tu amigo, como Alya... como todos ellos...

Agachó su cabeza y cerró con fuerza sus puños. Me sentí triste así que tome su mano donde estaba el anillo.

-No necesitabas darme el anillo. -Levanto su rostro. -Para mi ya eres mi amigo. -Le sonreí. -Lo aceptaré, si te hace feliz.

Sus ojos parecieron llenarse de colores y me tomo de la mano para colocar el anillo en mi dedo del medio.

-No tienes que usarlo siempre. -Escuche -Solo quería que lo aceptaras a él y a mí.

No entendia que me sucedia. Por un lado tenía Félix, mi amor imposible de toda la vida. Y por otro lado Adrien, no estaba enamorada de él, pero si me parecía atractivo.

Y por un camino lejano, Chat Noir.

-Marinette -Félix apareció frente a nosotros y aleje mi mano de la de Adrien.

-Félix -Intenté explicarle -Yo... Adrien... él... bueno...

-No te preocupes -Sonrió -Adrien me lo dijo antes de venir.

-Me retiro, los dejó solos.

Nos sentamos frente a la playa y el me entregó una bebida caliente.

-Sabía que serias perfecta para Adrien. -Lo escuche -Me alegra que las cosas entre ustedes vayan bien.

-Tu primo es muy amable. -Abrí la bebida. -No hay forma de llevarse mal con el. Es muy tierno...

-Marinette, ¿te gusta otro chico? -Casi escupo toda la bebida.

-¿Como? No me gusta nadie más, solo tu Félix...

Nos miramos fijamente y el tomo mi mano. Sabía que era el momento así que cerré mis ojos y deje que sus labios tocasen los míos.

Fue tan rápido que apenas había sentido sus labios. Así que cuando abrí los ojos lo mire extrañda.

-¿Nos vamos? -Se levantó y tome su mano para caminar a su lado.

Había algo mal, algo muy mal.

-¡Alya! -Corrí hacia ella y esta se asustó.

-¿Que sucede? ¡estas pálida! -Tome aire luego de haber corrido media playa buscándola. 

-Oh Alya... no se que esta pasando conmigo...

-Primero respira -Me dijo y una vez tuve aire le dije.

-Félix... Félix me beso -La ví sonreír. -Lo hizo en la playa...

-¡Al fin! ¡Lo hiciste Marinette! -Exclamó emocionada.

Mis ojos llenos de duda hicieron desaparecer su sonrisa.

-Alya... -Baje la cabeza.

-¿Que tienes? ¿Por que no está feliz?

Cerré con fuerza los ojos. ¿Como podía contarle lo que había pasado? ¡Ni yo misma lo entendía!

-Es que... cuando el me beso... yo... -Levante la vista -¡Cuando abrí los ojos solo podía ver a Chat Noir! ¡¿Entiendes?! ¡por un momento! ¡su rostro apareció frente a mi! -Confese -¡¿Dime que hago Alya?!

Estaba confundida.

Había soñado toda mi vida con un beso de Félix. Y ahora que finalmente lo tenía, pensaba en Chat Noir. ¡Y me sentía terrible!

Yo no amaba a Chat Noir, entonces ¿por que pensaba en el justo en un momento así?

-Dime una cosa -La vi cruzarse de brazos. -¿paso algo con el? Ya sabes, un beso, o algo más. -Me sonroje.

-¡Nada más! -Cubrí mis labios.

-¡Entonces paso lo primero! -Se sento a mi lado. -Marinette, ¿como paso? Me has dicho miles de veces lo mucho que te gusta Félix. ¿Como te dejaste besar por Chat Noir?

-¡Paso muy rápido! -Me levante para caminar por toda la habitación. -Nos encontramos luego de haber peleado y el estaba enfermo. ¡En una alucinación pensó que era Ladybug y me beso!

-Y tu lo rechazaste, ¿no? -Levanto una de sus cejas mientras me sonreía.

-Bueno... -Jugue con mis dedos.

-¡Claro que no! -Se levantó de golpe. -Nadie podría rechazar un beso de Chat Noir. ¡Ni siquiera yo! -Comenzó a reírse aunque a mi ese chiste no me encantó del todo. -Oh vamos Marinette, solo fue una broma. -Me dijo al ver mi cara.

-¿Que debo hacer? No quiero perder a Félix...

-Alejate de Chat Noir... -La observe -Ya se que me has dicho que solo te gusta Félix, pero no es normal que en pleno beso recuerdes a otro chico. Tienes que poner una distancia entre los dos.

-Es mi compañero, no puedo hacer eso.

-Busca otro entonces.

Alya tenía razón. Debía alejarme un poco de Chat Noir si quería continuar con Félix. ¿Pero como iba hacer eso?

De vuelta a la ciudad.

-Ladybug, me alegra verte. ¿Como te fue en tu viaje?

-Maestro Fu, necesito pedirle algo. -Hable.

-Te escucho -Me miro preocupado.

-Quiero tener otro compañero. Y tengo al chico indicado para eso.

Él me observo impresionada y decidí contarle mis razones. Tal vez no tan exactas como lo que estaba viviendo, pero si fuí sincera cuando le hable sobre mis sentimientos.

-Entiendo Ladybug, supongo que no tengo más opción que darte otro compañero. Pero -Note decepción en sus ojos. -una vez tengas tu nuevo compañero, recuerda que nunca más podrás ser la compañera de Chat Noir.

-Lo entiendo -Conteste segura.

No tenía idea de que luego de esa noche las cosas cambiarían. No sólo yo, Félix, Chat Noir, y nuevos héroes aparecerían.

Todo por culpa mia.