Tokyo revengers: Betrayal is never forgotten

Capitulo 12

1 つの戦い、あと 1 つだけ/1-Tsu no tatakai, ato 1-tsu dake/Una batalla, solo una más

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Han pasado más tiempo del debido, pues es viernes, pero dirán, ¿Qué tiene que ver?

Que Takemichi dijo que vendría en tres días, y ha pasado una semana de más del día al que el llegaría.

Sanzu como todas las mañanas fue a la casa de su hermana a ver si estaba el llorón.

Toco la puerta varias veces hasta que llego su hermana Senju, esta solo lo miro de pies a cabeza para sonreír.

_¿Buscas a tu príncipe?_

Ante la burla Sanzu volteó su mirada para que no la viera su hermanita menor, quien al ver su comportamiento dejo de sonreír para solo mirarle serió, no le gustaba cuando alguien se interesaba en su "pequeño angelito" demostrando su cara de despreció.

Y sin que tuviera algún cuidado tomo de la camiseta a Sanzu para que se acercara a su rostro para que la viera.

_Escúchame, no porque seas mi hermano signifique que seré gentil_

Sanzu al escuchar su voz más rasposa y venenosa trago en seco mirándola fijamente, queriendo voltear a ver a otro lado pero fallando en el intento que ni dio.

_¿Qué quieres de Takemichi?_

_¿q-Qué qui-quiero?_

_Habla, se bien que tienes otras intenciones, igual que con Muto, que por cierto, ¿No fue tu culpa que fuera a la cárcel?_

Palideció el peli rosa al escuchar eso de su hermana.

_(¡¿Ella lo sabía?!!)_

Miro con más terror a Senju cuando lo agarro ahora si del cuello.

_Cualquier cosa que le hagas a mi pequeño, todo dolor, cicatriz y miedo que le influyas, yo te lo daré mil veces peor_

Dejo Senju su cuello para solo aventar lo sin piedad, haciendo que el oji cian se golpee la espalda en la tierra y césped.

Justo la mujer cerro de un portazo su morada para dejar perplejo a Sanzu.

_(solo fingía conmigo, solo era buena cuando estaba el llorón, pero...¿Qué quiero de ese niño estúpido?)_

Esa pregunta no se fue de su cabeza aun cuando llego a su cuarto.

De un momento a otro tomo el cubrebocas negro que tenía desde que Muto se lo regalo, dejo de usarla un tiempo, pero había veces que se lo ponía solo por puro capricho, nunca se sintió mal cuando Muto se fue a la cárcel o cuando Mikey le hizo sus cicatrices.

Y sin que el quisiera recordó a Takemichi, sonriéndole como si hubiera hecho un muy buen trabajo.

_Bien hecho Sanzu-kun, ERES INCREIBLE_

Sus pupilas se ensancharon ante tal recuerdo, sus oídos se agudizaron al memorizar y repetir en su mente ERES INCREIBLE, con su voz suave y tierna y sin que se diera cuenta sonrió mientras un rubor se habría paso en su cara, puso sus manos en el pecho sintiendo un cálido sentimiento mientras el corazón bailaba en su caja torácica brincando varías veces en ese pequeño escenario durante su sesión de bailes llenas de un calor bonito y una gran felicidad.

_¿Soy increíble para ti? Porque eres la primera persona en decírmelo_

Dijo al techo mientras estaba recostado en su tatami.

_Takemichi, ¿Qué me hiciste?_