Cap.2
¿Han sentido esa sensación de sentirse observados? Una mirada tan intensa que les resulta incomoda. Hace horas me he quedado dormida, la habitación se encuentra en penumbras, la cortina bloqueo toda luz que pudiera entrar desde el exterior, no podía saber con exactitud si era de noche aún o ya había amanecido.
Abro los ojos levemente, un tanto asustada, de lo que pudiese encontrar, paseo mi vista forzosamente por la oscura habitación, hasta detenerme en la esquina izquierda, cercana a la puerta, desde la oscuridad un rostro un tanto magullado y ensangrentado me observa.
De un salto caigo de la cama, lastimando me el tobillo, trato de encender la pequeña lámpara que descansaba sobre la mesita de noche junto a mi cama, fallando en el intento.
—No temas, no te voy a hacer daño —Sonrió levemente, caminando hasta quedar frente a la mesita. Al encender la lamparilla pude verlo un tanto sorprendida. Su ropa estaba rota en algunos lugares, caí en cuenta de que, el no era normal, era un alma en pena, sin ningún rumbo tal vez. Extendió su mano derecha hacía mí —Soy Lucas —Me quede mirando la, a lo que el entendió la indirecta y la dejo caer. —Entiendo que estés sorprendida.
—Tu puedes manipular libremente los objetos. —afirmé.
—Si.
—Aaam, ya. Sam, Sami, Samantha, como gustes llamarme respondo —Me levanté como pude sintiendo mi tobillo lastimado arder por la presión que le proporciono mi cuerpo. Camine hasta la ventana, descorriendo las cortinas, ya estaba empezando a amanecer, a lo lejos se podía ver destellos anaranjados y rosas del sol.
—Disculpa por despertarte, no era mi intención, te veías muy agusto —Habló mientras me dirigía a la cocina y comenzaba a meter al refrigerador todo lo que había quedado comestible después de mi fatal caída.
—Si, que he tenido un día terrible, osea de esos en lo que solo quieres echarte a dormir sin que nadie te acose desde la oscuridad de tu propia habitación.
—Yo no te estaba acosando —Dijo mientras se recargaba de la pared.
—¡Que me has pegado un susto, es de muy mala educación mirar a las personas tan fijamente! —Se quedo en silencio, a lo que suspiré y me gire hacia el —Oye... no soy vidente como para saber que necesitas de mi... Así que, ¿me lo podrías decir ya?
—Necesito un pequeño favor tuyo —Dijo mirándome a la espera.
—Como todos. —su expresion quedó inmutable. —Ok. ¿Cuál sería ese “favor”? —Caminé unos pasos hasta quedar frente a el.
—Necesito que dejes de ayudar a Mikael —Dijo fríamente, a lo que lo mire frunciendo los labios, sopesando sus palabras.
—¿Cómo sabes lo de Mika? —Retrocedí un poco para poder verlo mejor ya que era muy alto y me sacaba casi dos cabezas. Analice su expresión extrañada.
—Eso no importa en este momento, solo debes negarte a ayudarle, recoger tus cosas e irte lo mas lejos posible, tu vida corre peligro aquí.
—¿Crees que es tan fácil? ¿Crees que puedo recoger mis cosas e irme y empezar una nueva vida de un día para otro, quien sabe dónde?
—Tu vida peligra al rededor de Mika, no sabes lo que es capaz de hacer para conseguir lo que quiere, el no es de fiar.
—Pero que mierdas dices, se que no es fiar, se que sus intenciones no son las mejores pero, ¿qué puedo hacer yo?, ¿irme así por así y dejar todo lo que he luchado por conseguir ?—Lo miré como si le hubiera salido un tercer ojo.
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PAGANDO POR LA MUERTE
SpiritualSamantha Kay, una chica que a luchado contra su propio Don, con un pasado oscuro, intentará salir con vida de una peligrosa misión. Lucas Barro, el joven que por una mala decisión a terminado perdiendo la vida, intentará detener los horribles plane...