shameless ; ❪ tom kaulitz. ❫

❪ 𝟏𝟗 ❫

CAPÍTULO DIECINUEVE | BASTA DE TOM !

EMMA

Los jadeos de la gente sorprendida e intentando entender que pasaba y formándose en una ronda sabiendo perfectamente que eso se hacía para ver bien una pelea. Mi boca se encontraba entreabierta tratando de procesar exactamente lo que sucedió esos últimos minutos porque era demasiado para mi pobre cerebro. Yo bailando con Tom, pasando el mejor momento de mi vida y de repente a Georg se le ocurre arruinarlo.

Bromita, Georg. Te quiero pero en estos momentos te odio.

Indudablemente me moví hacia el núcleo de la pelea, no porque quisiera sino porque era lo que Tom decidió hacer y como yo me encontraba agarrada de su brazo, y no me di cuenta el momento exacto en que comenzó a moverse, no me quedó otra que seguirlo con pasos torpes.

Los amigos del herido, quiénes parecían estar en un altísimo nivel de ebriedad trataban de buscar más pelea para vengar a ese chico, o algo así. No entendía muy bien el porqué en realidad en vez de manejar la situación como adultos civilizados, preferían la violencia. Yo sabía perfectamente que mis chicos no eran violentos, entonces ese tipo tendría que haber hecho algo que realmente sacara de sus casillas a Georg, de otra forma no habría hecho lo que hizo.

Incluso la música se detuvo y era solo cuestión de segundos para que los guardias de seguridad nos sacaran a patadas de allí.

— ¿Qué mierda pasó? —el de trenzas le habló a su gemelo, que se encontraba a pocos metros de nosotros.

A medida que nos acercábamos a los demás, pude verle la cara a los amigos del herido. Estaban enojados... no, enojados no, furiosos y creo que incluso uno era el que nos gritó cuando pasamos sin hacer fila. Al ver que nosotros estábamos del otro bando, uno intentó empujar a Tom para sacarlo de quicio pero quizás y solo quizás se confundió.

Y me empujó a mí.

— ¡Maldito loco! —le grité confundida, ¿por qué siempre yo?

De repente Tom se zafó de mi agarre y se abalanzó hacia el sujeto para empujarlo con más fuerza, lo hizo tambalear y casi se cae se culo. Le di una mirada significativa a Bill, yo no podría detener a un Tom furioso, pero él sí, así que con rapidez se acercó a agarrar a su hermano por los hombros y tirarlo para atrás.

Busqué a Lexi con la mirada, algo preocupada. Por suerte la encontré con rapidez, tenía la mirada algo traumada y no dudé en acercarme.

— ¿Qué pasó? —le pregunté, rodeándola por los hombros, y despertándola de su ensoñación. Los gritos insultantes iban y venían, hombres enormes de negro se acercaban para intentar calmar la situación o entender que mierda había pasado.

Gustav y Bill intentaban explicarles pero por el disturbio generado, les pidieron amablemente a los del otro grupo que se fueran. Bueno, no iban a echar a una banda famosa eso estaba claro, no obstante decidimos que lo mejor sería que nosotros nos fuéramos. Después de todo ya era algo tarde y luego de lo sucedido, no lo pasaríamos bien.

Al final, lo que pasó fue que Georg vio el momento justo en que el sujeto intentó ponerle una pastilla al vaso de donde tomaba Lexi y esa fue la razón de su reacción y el porqué la rubia estaba tan traumada. Por suerte los chicos siempre estaban cerca de nosotras y gracias a Dios Georg lo vio y pudo evitarlo, no me quiero imaginar lo que hubiese pasado si Lex llegaba a tomar eso. Me causaba una repulsión que gente haga este tipo de cosas con tal de generar un mal, y estaba tan enojada que quería volver y golpearlo yo misma, pero claro que ninguno de ellos me dejó. Sabían que me harían papilla.