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La mañana siguiente fue peor que la anterior. Taehyung al ver a su amigo tan distante del alfa pelirrojo quiso entromerse pero no logró hacer nada ya que su esposo lo detuvo a tiempo.

Ocasionando otra pelea entre la pareja

— Cariño — llamó el rubio

— No está — respondió el omega con los brazos cruzados sentado en el filo de la cama con total molestia.

Odiaba que su alfa le ordenara qué hacer

— Te traje tartaletas de fresa — enseñó la pequeña bandeja que tenía oculta en su espalda logrando que los ojos le brillaran al platinado.

— ¡Esto no es justo! — lloriqueó

— Es mi forma de disculparme.

Taehyung no quería estar molesto con él, así que por primera vez dejó su orgullo de lado y se abalanzó contra el cuerpo del alfa.

— Te quiero. Pero no me gusta que interfieras en lo que yo creo correcto. 

— Bien — aceptó gustoso el beso

Después de unos minutos de una sesión de besos con su alfa, el omega bajó hacia la cocina sigilosamente mientras que el mayor se encontraba en el baño dándose una ducha.

A pasos apresurados ingresó a un pasillo que lo llevaba directamente a su objetivo pero antes de cruzar la puerta escuchó como dos chicos discutían.

— Te dije que se iban arreglar tarde o temprano — habló con obviedad uno de ellos — aunque después de eso tenemos que encontrar otro lugar para hacer nuestras apuestas de poker.

— ¡Voy a matar a Jeon! — soltó molesto el guardaespaldas — Como se le ocurre tomar nuestro lugar — enfatizó la penultima palabra — para hacer sus cochinadas con su chefcito — continuó hablando tosco.

— Déjalo, hombre.

— ¡Nada que déjalo! Ese maldito ensució mi único lugar seguro — golpeó el pecho del otro sin lastimarlo. No iba a negar que le gustaba golpear los pectorales duros del alfa cuando estaban solos.

— ¡Félix!

— Lo siento, no lo pude evitar.

Hyunjin soltó un suspiro

— Y yo no puedo evitar esto — dijo antes de apresar sus manos y envolver su cintura en un beso apasionado.

Taehyung al abrir la puerta y encontrarse con tal escena, salió disparado hacia su habitación. No era su intención interrumpir algo que recién estaba empezando a cocinarse.

— Bebé ¿A dónde fuiste? — el alfa recién bañado preguntó curioso.

— A tomar aire — dijo con simpleza

Yoongi asintió no muy convencido pero lo dejó pasar.

— Acaba de llamarme mi hermano, no tarda en venir — informó mientras se ajustaba la corbata.

— ¿Hermano? ¿Tenías un hermano? — ladeó su cabeza confundido viéndose tierno antes los ojos de su alfa.

— Claro... ¿No te lo dijo Taehjoon?

Kim negó

— Entiendo.. pero no tienes nada que preocuparte. Jinnie es un amor de persona. Igual que mi sobrino.

— ¿Tiene un cachorro?

— Si y te tiene miedo. Bueno no a ti sino a Taehjoon — se rascó la nuca nervioso.

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