Problemas

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Lisa

Estos días con Jennie en casa han sido geniales, dormimos juntas, desayunamos juntas, nos duchamos juntas, ella no se separa de mi, salimos en ocasiones a pasear por ahí o simplemente nos quedamos en casa a ver alguna serie y por las noches tenemos sexo, aunque empiezo a creer que es algo más que sólo eso y me agrada, también sus padres están por llegar de su viaje y me pone un poco de nervios lo que le prometí a Jennie

También en estos días los chicos y yo hemos estado practicando todas las tardes. Todo marcha muy bien, incluso con Rosé, cuando le di la noticia de que Tae había conseguido participación en un evento musical y que habría buscadores de talento lloró de la emoción y quizá esté con nosotros mucho antes, eso me alegra demasiado. Por fin Rosé volverá, por otro lado Jennie está apoyándonos también y parece emocionarse igual que nosotros, hoy es miércoles y nuestra presentación es el sábado lo que significa que tenemos tan sólo 3 días para enfocarnos y hacer que todo quede perfecto.


Eran al rededor de las 8 de la noche, Jennie y yo estábamos mirando una serie cuando un sonido de celular llamó nuestra atención, era aquel teléfono del cuál recibíamos ordenes así que me levanté del sofá actuando de lo más normal para que Jennie no sospechara nada y así atender la llamada.

- Diga? - hable con tono natural.

- Tú y el chico tatuado tienen trabajo que hacer esta noche, en breves tendrán la información - Dijo aquel sujeto.

- Entendido - alcancé a decir cuando colgaron.

Ahora tendría que inventar algo, una buena excusa para salir sin que Jennie sospeche algo, en estos días a cualquier lugar dónde voy ella viene conmigo, no me deja sola ni un segundo así que debo pensar algo rápido, el teléfono sonó y al abrir el mensaje era la foto de otro tipo junto con sus datos, bien... una golpiza más supongo, Le envíe un mensaje a Kook para verlo en un sitio intermedio.

- Lisa?

La voz de Jennie me provocó un susto.

- Quién es? Por qué no vienes aquí conmigo para ver la televisión - Jennie me miraba.

- Jennie, tengo que salir un par de horas - dije un poco nerviosa - verás, eh hay un problema con, con mi hermano, si eso es, mi hermano tiene un problema y necesito ir a verlo.

- OK déjame ir por una chaqueta y vamos, sirve que conozco a mi cuñado.

Mi-er-da susurré para mi, Jennie se levantaba del sofá con dirección a la habitación.

- No, no es necesario, además es un poco personal esto y mi hermano suele ser muy reservado. - dije mientras la guiaba nuevamente a sentarse - esperame aquí, no tardaré, lo prometo.

Subí rápidamente a la habitación por una sudadera más grande que pudiera usar por encima de la ropa que tenia, no quería mancharme de sangre y tener que dar explicaciones a Jennie nuevamente.

Jennie me miró de forma sospechosa, pero no le di tiempo a que dijera una sola palabra cuando sali de prisa del apartamento.

Al cabo de un rato llegué al sitio acordado y Kook ya me estaba esperando junto a la motociclista qué utilizábamos para el trabajo.

- Estás listo? - pregunté

- Si, vámonos ya, mientras más rápido lleguemos, más rápido terminamos - Kook subió al asiento trasero de la moto y así nos fuimos en busca del sujeto.

Esperamos casi una hora cuando este apareció, así que sin más nos bajamos de la moto sin quitarnos los cascos y seguimos unas cuantas calles para luego amordazarlo y arrastrarlo a un punto más oscuro donde pudiéramos hacer nuestro trabajo.

Entre La Espada Y La Pared // Chaelisa & Jenlisa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora