𓂃 🫐; Random quotes de oc's pendejos. ❟

01.- Nathair

Para una persona que siempre había vivido en la soledad, era complicado el tema de expresarse; antes no tenía tal oportunidad, pues sus únicos compañeros eran avaros asesinos a sangre fría, ¿Qué podía expresar? ¿Miedo? Por supuesto que no, ¿Felicidad? ¡Mucho menos! No es como si él hubiera elegido ese camino, pero tampoco podía salir tan fácil de ese lugar, así que le parecía inútil quejarse de ello.

Nathair estaba en peligro constante, viéndose obligado a manejar una doble vida en caso de necesitar un respiro; tenía que ocultarse y mantener una fachada de chico bueno para que la gente de su colonia no se preocupara por su extraña apariencia. Era un extranjero, eso no podía negarlo ni con un acta de nacimiento falsificada, necesitaba ganarse la confianza de sus vecinos aún sabiendo que no la merecía. Su maestría tenía que servirle de algo, por lo que decidió trabajar en el jardín de niños local, no era la mejor forma de pasar desapercibido, ¡Y con mucha razón! Si apenas podía cuidarse a sí mismo.

Siempre iba de aquí para allá con su despeinado pelo verde, un traje negro y una corbata roja mal amarrada. La apariencia no importaba, era un maldito sin importar su ropa, eso lo sabía mejor que nadie.

Quizás fue por eso que su vida tuvo un gran giro cuándo un lunes encontró a una pequeña niña deambular en su patio trasero, apenas se tomó el tiempo para averiguar cómo había llegado ahí, era lo de menos, necesitaba atenderla rápido y verificar si no estaba herida. La paternidad no estaba en sus planes, pero no podía quedarse de brazos cruzados sin hacer algo al respecto. Vaya, el universo actúa de formas muy extrañas en ocasiones.

"Bien, dormirás aquí hoy, pero en la mañana te llevaré a la policía y te vas."

Fue lo primero que se le ocurrió para atender la voz suplicante de la niña, estaba decidido, solo sería un día, nada podía hacerlo cambiar de opinión... ¿Cierto?

Aunque no fue así, el mayor sentía que había recuperado algo, apenas y le molestaban los llantos de la niña, algo dentro de él se sentía cálido, posiblemente era la primera vez que se sentía completo. El hacer una segunda porción de comida, escuchar las fantásticas historias y ver los creativos dibujos de "Fanny" -así le había puesto, pues la niña no se había presentado con un nombre en específico- lograban sacarle pequeñas sonrisas.

Esa mañana no la llevó a la estación, tampoco la siguiente, sin notarlo, el mes había terminado. Estaba decidido a cuidarla tanto tiempo cómo fuera necesario, la poca información que había obtenido le hizo comprender por qué el día que la encontró tenía la ropa tan sucia y desgastada, sabía que se trataba de una persona solitaria, pero a comparación de la serpiente, la pequeña no comprendía eso.

Simplemente no podía... No quería que alguien más se viera obligado a crecer sin unos brazos a los que acudir.

"Sí... Ya había visto que es un oso, obvio, lo había visto desde un principio."

"¡No mienta, señor Nath! O le va a crecer la nariz, así como el Pinocho."

La dulzura e inocencia de un niño siempre lograba atraparlo, pero con la pequeña había pasado más tiempo que con los infantes del jardín; sabía el nombre de todos sus peluches -que, por supuesto, él le compró-, sus alergias, las caricaturas que le gustaban y sus colores favoritos. Incluso su refrigerador y paredes estaban tapizado de los dibujos que había.

Aunque, había un pequeño problema: ¡El señor Nath nunca sabía qué decirle! Su mirada siempre era seria, sin una pizca de emoción en sus ojos ni en sus palabras, no conocía el amor, y no sabía cómo expresarlo. Un niño no aceptaría un "está bien" por respuesta, pero la pequeña Fanny parecía comprender, o al menos, parecía no molestarle aquello, ¡pero no se quedaría así! Él más que nadie sabía la importancia del afecto en esa etapa de la vida, pero nunca lo había experimento en carne y hueso.

Una idea atravesó su mente, funcionaba con sus antiguos compañeros de equipo, así que no perdía nada haciendo el intento con su hija adoptiva. No perdía nada intentándolo.

"Wow, tá sé an -deas i ndáiríre."

Exclamó orgulloso mientras sostenía una hoja que la pequeña había coloreado, se notaba una pequeña curva en sus labios, era, posiblemente, lo más cercano a una sonrisa. Y no era por el dibujo, era por la mirada confusa que le otorgó Fanny, incluso se le escapó una risa, pero una muy corta. Si no podía ser capaz de decir las cosas en español, quizás en su idioma sería más fácil, aunque eso significara que la menor no supiera que está orgulloso de ella.

"Eh... ¿Gracias? ¡Bueno, ahora vayamos a comer algo!"

El señor asintió, doblando muy cuidadosamente el papel para así revolver su cabello, poco le importaba si la consentía demasiado, esa era su forma de expresarle su aprecio.

Sólo así, dejó de ver a Fanny como un castigo o el karma actuando, comenzó a verla como lo que era; una niña buscando una familia, aunque él no podía proveerle todo el afecto necesario, estaba comenzando con esa nueva etapa de su nueva vida.

Tenían un largo camino por recorrer, no solo para su pequeña niña, pues Nath aprendía junto a ella.
Aprendía de las simplezas de la vida, de las risas y los enfados, de despertarse después de una noche de películas, de celebrar un cumpleaños, a amar, a tener una vida cotidiana.

Por primera vez en su vida, había tomado una buena decisión.
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Nota:
Kiubo, hace mucho no subía algo aquí, pero mi amix me motivó a publicar esto y bueno, ¿Quién soy yo para negarme?
La traducción de lo que dice Nath es "vaya, realmente es muy lindo", es que el don es irlandés y la única forma de demostrar cariño es que parezca que está mentando la madre (?)
Este cosito narra un poco sobre uno de mis oc's; Nathair, un viejo híbrido de serpiente amargado y con muchos crímenes de por medio que se convierte en papá luchÓn. No sé que me fumo para escribir estas historias.
Posiblemente esto quede ignorado, pero si alguien llega a leer esto: Mwah, gracias por tomarte tu tiempo, tqm. 💗