EL CHICO DE LA CHAQUETA NEGRA

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No había vuelto a sentir la necesidad de conocer alguien.

Hasta que lo vi.

El chico de la chaqueta negra aparece cada domingo.

Ha despertado algo dentro de mí y me gusta.

Mi mente esta atenta a sus movimientos.

Mis pupilas brillan desde lejos.

El chico de la chaqueta negra que no conozco.

Ha despertado algo dentro de mí y me gusta.

Me lo imagino caminando lentamente sin mirar atrás...

Y yo voy detrás de él, dejándome llevar.

El chico de la chaqueta negra desprende inspiración.

Ha despertado algo dentro de mí y me gusta.

Oh! El negro combina muy bien en él.

Cubriendo sus delgados brazos.

Me gustaría acercárme y preguntar su nombre.

El nombre de el chico de la chaqueta negra me sabe a poesía.

Ha despertado algo dentro de mí y me gusta.

Lo sé, esta esperanza de saber de él puede ser traicionera, pero...

Haré que él gire su mirada apuntando hacia la mía.

Y justo ahí sabré que nada fue en vano.

Porque el chico de la chaqueta negra hace rimar mis versos.

Ha despertado algo dentro de mí y me gusta.

Y se que él...

Algo en él es especial.

Le observo.

El silencio es inquietante.

Y mi mente hace preguntas.

Preguntas como...

¿Quién es él?

Y yo respondo entre susurros...

El chico de la chaqueta negra es poesía.

Es cada verso encendido que me despierta por las noches para escribir.

Aquel no ha llegado hoy.

Pero descubriré su rostro enmascarado.

Porque sin haberlo visto cara a cara.

O con pupila entre pupila.

El chico de la chaqueta negra es belleza escondida.

Es como arena movediza que no logro atrapar.

Oh! El chico de la chaqueta negra...

¿QUIÉN ES?

Que alguien me diga ¡por favor!

Que las letras, la poesía lo traigan de vuelta a mí.

Y que le digan que alguien escribe sobre él, a escondidas...

Nunca olvidaré el día en que las lágrimas cayeron.

El chico de la chaqueta negra seguía su camino.

Mientras mi camino era distinto al suyo.

Tantas palabras que pudieron ser dichas y nunca fueron dichas.

El chico de la chaqueta negra se había ido mientras lo buscaba.

La esperanza de volverlo a ver fue traicionera.

Pero juraría que estos versos no.

Porque el mismo brillo que desprendía lo guiarán hacia mí...

Y le diré tantas cosas que nunca dije.

Lo más triste de todo esto es que...

El chico de la chaqueta negra no sabe quién soy yo.

¿QUIÉN SOY YO?

Pero eso. ¡Qué importa!

Si la pregunta siempre es la misma...

¿QUIÉN ERA EL CHICO DE LA CHAQUETA NEGRA?

Esa chaqueta negra que siempre vi.

Y que nunca tuve.

Y que nunca lo tuve.


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POEMAS DE JUVENTUD (POEMARIO COMPLETO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora