CAP 9 - Un rey Invencible

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Lucían

Dentro a la iglesia acompañado de Lin, quien me está sosteniendo la mano, mientras seguimos al alcalde, unas chicas del pueblo se nos acercan y Lin se nota incómoda.

Chica: Joven.. Tenga (lo dice un poco nerviosa y sonrojada entregándome una gabardina negra)

Lucían: Muchas gracias!!

Le digo mientras le ofrezco una sonrisa y en ese momento siento como Lin me estaba fulminado con la mirada.

Lin: Gracias! (Lo dice con sarcasmo)

Lin me agarra de la mano y me jala en dirección del alcalde.

Lin: Por lo visto eres muy popular entre las humanas de este pueblo, verdad?

Lucían: Porque lo dices?

Lin: Porque esa humana no dejaba de mirarte, porque no la llevas al lago mejor, así puedes foll...

Antes de que terminará esa última palabra la agarró de la cintura y le robo un beso, cuando finalizó me acerco a su oído

Lucían: Si mejor vamos los dos para poder marcarte y que sepan que eres mía.

Lin se sonroja y aparta la mirada, mientras seguimos al alcalde.

Lucían: Adonde nos dirigimos? Debo ir a buscar a Juan y Martha? De seguro deben estar buscándome

Alcalde: Ellos... están...
Justo antes que terminar es frase oigo los gritos de Juan, suelto la mano de mi maté y salgo corriendo de donde se oyen, al entrar a la habitación encuentro a Juan acostado en una cama vendado, con un brazo arrancado y gritándole a una enfermera que le deje ver a su esposa.

Juan: COMO ESTA ELLA!!!! DONDE ESTA!!!

Enfermera: Señor debe calmarse... Ella... Ella no pudo sobrevivir

Justo en ese momento caigo en el piso y mi maté me abraza colocando mí cabeza en su pecho desnudo y empiezo a sollozar.

Juan: Hijo... Lucían eres tú?

Lucían: (Con la voz cortada) Que sucedió?

Juan: Ella me protegió

En ese momento escucho empieza a convulsionar bruscamente y la enfermera empieza a llamar a la doctora.

Lucían: Que sucede?? PAPÁ!!! JUAN!!!

Me acerco a él y siento como su latidos se van apagando lentamente, la doctora entra a la sala y trata de hacer el RCP, pero sin resultado y en ese momento escuché lo que no quería escuchar.

Doctora: Hora de muerte 06:45 de la mañana, lo siento, hicimos todo lo posible por salvarlo, pero sus heridas eran profundas y su corazón no resistió.

Mi mente se nubló, mis piernas tiemblan, el dolor en mi pecho hace que sienta como si me rodeara una extraña oscuridad que hace que recuerde mi pasado, cuando padre hacia que entrenará hasta que se rompieran mis huesos; hasta que terminaba desmayado, las veces que hacía que peleará contra otros lobos más grande y me terminaban dando palizas, cuando fui condenado a morir, cuando logré escapar, cuando mataron a mi hermano y ahora me arrebatan a dos seres que amó, que me enseñaron el amor de una familia, siento como la ira se apodera de mí, como las llamas en mi interior empiezan a salir a flote.

Me muevo solo, dirigiéndome afuera buscando a los responsables de este echo.

Al salir veo dos lobos intentado someter a Sebastián, que está tratando de entrar a la iglesia, sin previo aviso arremeto contra el, agarrándolo del cuello y estampandolo contra el suelo.

Óliver: SUELTALA!!! Te lo imploro, tu has ganada (Se arrodilla pegando su cabeza al suelo)

Lanzó a Sebastián y me dirijo hacia el, soltandole una patada que lo manda a volar.

Lucían: Se atrevieron a tocar a los míos. Se atrevieron cazar a mis seres queridos. Se atrevieron traer la guerra a mis tierras. Y ahora me pides PERDÓN!!! QUE LES CONTEGA COMPASIÓN!!!

Benjamín se acerca a mi tambaleándose y me golpea en la cara, lo que sea que lo golpea en el estómago, y arrojarlo al suelo, subiéndome encima de él; arremetiendo con todas mis fuerzas, golpeandolo en la cara sin parar; dos lobos se acercan, pidendo que lo suelte que lo matere, en ese momento emito un rugido tan fuerte que hace que se somentan a mí, y caigan al suelo; yo retomó mi asaltn contra el hermano de mi maté sin compasión.

Lin: Amor, sueltalo. POR FAVOR!!!

Lin sostiene mi puño que ya estaba goteando sangre de los nudillos haciendo que me detenga por un instante y antes de que iniciará nuevamente mi arremetida, me abraza con fuerza colocando mí cabeza en su pecho cerca de su corazón, besando mi frente y empieza a acariciar mi cabeza.

Lin: Te amo mi rey, por favor, apacigua tu corazón (Me lo dice en un susurro)

Abrazo a mi maté tratando de calmarte,  y lágrimas caían por mi rostro; en ese momento dos lobos arrastran a Benjamín quien era incapaz de moverse, junto a sus hermanos.
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En Búsqueda De Mi MateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora