Prólogo

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El sonido de la lluvia tamborileaba a mi oído, evitando qué me levantase de mi cama mientras mi celular vibraba seguido desde  hace  diez  minutos indicando un nuevo día de clases, no tenía ganas de nada, excepto que seguir durmiendo, no me sentía bien.. Eso era seguro, pero no me  podía permitir seguir viviendo así. Mi lema motivacional era que la vida te enseña qué aunque tengas tu mundo  hecho un caos,   debes seguir adelante, sin embargo era más fácil decirlo qué ponerlo en práctica, lo intentaba pero no servía de nada, solo  era una  rutina constante con altibajos emocionales en mi día a día.

La vida es efímera, tan dolorosa pero a la vez hermosa,  donde los pequeños detalles hacen la vida una más llevadera y alegre, en la que  esos momentos difíciles se convierten en un obstáculo para mejorar y  crecer como persona.

Recordaba, a mi madre decir que dos personas que se parecen, no están destinadas a estar juntas en la vida, sabía que era cierto pero, ¿acaso no es posible que ambas   con aspectos  similares y una vida casi idéntica, desafien la leyes del destino.

¿Y si esto no funciona?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora