硕珍的乐趣² [ NamJin ]

O N C E

Namjoon podía ver como lentamente, una ardiente ira llenaba los ojos de Taehyung, y sabía exactamente como se sentía el hombre. Si lo que Seokjin dijo era cierto, y Namjoon sospechaba que lo era, entonces quería saber cómo demonios el asistente del médico había ganado el acceso a la casa de Jimin.

Namjoon apretó al hombre en su brazo. La cabeza de alguien iba a rodar por poner así a Seokjin en peligro. El pequeño hombre había pasado demasiados años teniendo miedo. Se suponía que aquí estaría seguro para poder aprender y experimentar, todas las cosas maravillosas que el mundo tenía que ofrecer.

No tenía que estar temblando de miedo como lo estaba ahora mismo.

Namjoon giró a Seokjin en sus brazos y aplastó al hombrecito contra él, frotándole con sus manos la espalda hacia arriba y hacia abajo para calmarlo. Sabía que al joven le gustaba su tacto, incluso que lo ansiaba. Si así conseguía que el pequeño se calmara, Namjoon se lo daría.

Sabía que había tomado la decisión correcta cuando la tensión lentamente se fue evaporando de Seokjin y el hombrecito comenzó a ronronear y a frotarse contra él. Fue una clara señal de que el chico estaba justo donde quería estar.

—¿Está Seokjin seguro de eso? —importunó Taehyung.

Los ojos de Namjoon se estrecharon mirando al hombre mientras le gruñía. Uno, porque estaba hablando de Seokjin como si no estuviera siquiera en la habitación. Y dos, porque toda la tensión que había drenado del joven estaba de regreso.

—Sí, Seokjin está seguro —gruñó Namjoon—. Y deja de hablar de él como si no estuviera aquí. Si tienes algo que preguntarle pregúntale directamente.

Taehyung miró sorprendido por un momento ante la vehemencia en la voz de Namjoon, pero luego asintió. — Discúlpame. No quería molestarle más de lo que ya lo está.

—No estoy seguro de que eso sea posible, Taehyung —Namjoon sintió como se le hacía un nudo en el estómago al recordar las borrosas cicatrices blancas en la piel del chico—. Ese hombre lo ha maltratado quizás incluso peor que su antiguo dueño. Experimentó con él, así que puedes figurarte por qué está tan molesto.

—¿Qué quieres decir con que experimentó con Seokjin? — preguntó Jimin mientras dejaba caer los ojos del rostro de Namjoon y de vuelta en el jovencito.

—Creo que ese hombre sabe quién y qué es Seokjin — explicó Namjoon—. Tomó injertos de piel, sangre y fluidos, y le inyectó cosas. Y no, antes de que pregunten, Seokjin no sabe qué le inyectaron, pero dice que ese tipo estaba realmente entusiasmado con lo que encontró.

—Beomgyu lo dejó entrar —dijo Seokjin mientras levantaba su cabeza y miró por encima del hombro—. Tal vez sabe algo acerca de ese tipejo.

Namjoon sonrió sobre la coronilla del chico. Sabía que su bebé era inteligente, pero Seokjin le estaba sorprendiendo incluso a él. Después de todo lo que había pasado, habría esperado que se acurrucara en un rincón en algún lugar gimiendo de miedo. En cambio, el hombrecito estaba ofreciendo sugerencias, y eran estupendas.