20: 00 pm
Lunes 21 de junio
Casa de Yukako, Morioh, Japón
Ignorando el pequeño acontecimiento en el que mamá casi descubre nuestra relación... Por fin ha llegado el día. Celebración no solo de fin de curso, sino también por haber ganado la competición impuesta por las chicas de la clase: la pareja pionera consolidada antes de las vacaciones de verano. Y es que siendo del todo sincera, nunca pensé que ocuparía un puesto en un "concurso" que días atrás consideraba una tontería. No me quejo, no me quejo.
-Vas a llegar tarde. Date prisa.
Termino de ponerme los pendientes y me precipito a salir de casa, acompañada de... Esperabas que dijera Okuyasu, ¿no? Pues lamentablemente mis amigas no lo han permitido. Quieren que me reencuentre con él en el baile de graduación para no arruinar la sorpresa que ellas mismas han planeado.
-Vooooy -tomo el brazo de Yukako y nos precipitamos al punto de encuentro.
Minutos después, ya nos situamos en el pabellón del instituto, donde todos los profesores se mueven de un lado para otro y los demás estudiantes de Grado Inferior, Medio y Superior colocan los preparativos. Globos, cintas de colores, sillas, mesas repletas de comida. Hay incluso un escenario donde recibiremos nuestros diplomas y birretes.
-Me voy un momento a saludar al profe de mates. ¿Vienes?
Sonrío, sacudiendo la cabeza.
-Cojo un vaso de agua y ahora te alcanzo.
Y eso me dispongo a hacer nada más verla alejarse, pero me detiene el propio Kira. Viste un ilustre y distinguido traje púrpura y su cabello ha adquirido una tonalidad mucho más oscura que la que describió vagamente Okuyasu, aunque todavía conservando algo de su matiz rubio natural.
-¿Podemos hablar un segundo? -su mirada se pierde entre la multitud situada detrás de mí. Hay algo siniestro en la manera en la que habla o inspecciona cada individuo.
-Claro, ¿de qué se trata?
-Vayamos a un sitio más privado, ¿quieres? -sin esperar respuesta, avanza hacia el pasillo, esperando acertadamente a que vaya tras él. Sin mucho esfuerzo me percato de que estamos solos-. Tengo la impresión de que me llevas investigando desde hace un tiempo... ¿Es eso cierto?
Trago saliva mientras se acerca con un aire dominante que desde luego acompaña la manera en la que se han desencadenado los acontecimientos.
-Yo no he... Yo no he hecho eso.
-Me cuesta creerte, (T/N). Ten en cuenta que nada de lo que puedas decir va a sonar convincente de ahora en adelante -apoya su espalda contra la pared, sin dejar de inspeccionarme-. Supongo que del mismo modo en que eres consciente de que has dado una impresión equivocada con tus acciones, también eres capaz de imaginar las consecuencias que se aplican cuando alguien se atreve a meterse en asuntos ajenos. En concreto, los míos.
Ante el pánico del efecto de un arrepentimiento y vergüenza combinados, me quedo quieta en el sitio, como si esa se correspondiera con una de las escasas cosas sensatas que me quedasen por hacer. Tomo aire con intención de tranquilizarme, sin éxito:
-La razón por la que quizás piensas que te sigo el rastro es porque tú estás haciendo lo mismo. Si no, explícame cómo te empezaste a interesar por mí, averiguaste mi nombre o insististe tanto con mi relación con Okuyasu.
Se ríe por lo bajo mientras sus ojos, cuyos iris dan la sensación de adquirir una tonalidad azulada perversa, se posan de nuevo en mis manos, como si quisiera tocarlas de nuevo. Me estremezco tan solo de pensarlo. No vuelve a decir nada y solo es apreciable durante unos minutos un incómodo cruce de miradas que se procede con un silencio sepulcral.
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20: 10 pm
Lunes 21 de junio
Pabellón de Morioh, Japón
-El reparto de diplomas va a empezar en breve y (T/N) sigue sin aparecer...
-Tranquilízate, Okuyasu -Josuke toma asiento en su sitio correspondiente, sujetando entre sus brazos tres paquetes de galletas que dudo que comparta-. La ceremonia no va a dar comienzo sin ella, ya has oído a las chicas, y solo entonces tendrás permitido verla.
-Aun así... ¿Dónde estará? -miro a todos lados con ansiedad-. Déjame ir a buscarla.
Suspira con cansancio, poniendo sus pies en mi silla en cuanto me levanto.
-Me van a regañar por reservarte el sito. Llámala y ya está.
-¿Qué pasa si su móvil está apagado, en silencio, o...?
-Mal vais los dos si tanto os preocupáis por tonterías así -se lleva la mano directa a la frente-. Tú prueba.
Y eso termino haciendo, aunque el alboroto que nos rodea apenas me deja escuchar nada. Sin necesidad de considerarlo dos veces me apresuro hacia un lugar alejado del ruido donde poder llamarla con tranquilidad. No creo que Josuke se desespere por el simple hecho de que me haya alejado un momento. No tanto como yo, estando en la situación en la que estoy, y necesitando urgentemente comprobar que (T/N) está bien.
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Corazón Acelerado - Okuyasu x Reader
Romance[ACTUALIZACIÓN 21-06-24: CAPÍTULO 15!! ♥ espero que os guste y pronto seguiré subiendo más capítulos] -*- -Si nombrarais a todos los chicos de los que algun...