Capítulo 12

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Después de las tutorías salgo directo a mis clases de siempre y me quedo toda la mañana entre apuntes y materias aburridas. Para la hora del almuerzo regreso a mi habitación en busca de las gemelas, sin embargo ninguna de ellas se encuentra allí así que decido tomar una ducha rápida y cambiarme de ropa. La verdad es que no tengo muchas ganas de comer pero si no me obligo a ingerir algo de calorías no voy a llegar viva para el resto de la tarde.

Mientras me visto no puedo dejar de pensar en lo que ocurrió hoy con Matt. Una parte de mí se siente sorprendida por la noticia pero debo admitir que sería egoísta pretender que él no puede ser feliz con Emma mientras yo busco exactamente lo mismo con Nicholas. Así que lo tomo como la excusa perfecta para terminar de quitármelo de la cabeza.

Me pongo un conjunto deportivo negro y una chaqueta de mezclilla para resguardarme del frío. Últimamente el clima está empezando a cambiar y sé que en cuestión de semanas el otoño va a llegar. Luego tomo un poco de dinero y lo guardo adentro de uno de mis bolsillos junto con el teléfono y las llaves pero cuando salgo de la habitación encuentro una segunda nota a los pies de la puerta.

<<creés que no sé lo que estuviste haciendo este fin de semana?? ya te lo dije, aléjate de mi chico>>

Aquello me pone los pelos de punta. Era evidente que el mensaje estaba dirigido específicamente para mí. Y ya no podía negarlo. Un escalofrío me recorre la espalda al darme cuenta que seguramente me habían dejado ese pequeño pedacito de papel mientras me estaba duchando y empiezo a caminar rápidamente por los pasillos de la residencia antes de que el miedo me invada.

Cuando llego a la cafetería de la universidad siento que vuelvo a respirar con normalidad. El lugar está lleno de gente y en parte aquello me da algo de seguridad. Después de pedir un sándwich de pollo y una gaseosa voy a la primer mesa libre que encuentro y como en silencio.

¿Qué se supone que debo hacer? Las notas son anónimas y no hay cámaras en los pasillos, por lo que sería una pérdida de tiempo intentar averiguar quién es la persona detrás de esas amenazas. Y en el peor de los casos, ¿qué peligro estoy corriendo? Seguramente sea alguna tipa con la que Matt se acostó y aún sigue obsesionada con él.

Termino de decir eso y un grupo de chicos ingresa a la cafetería. Entre ellos se encuentra mi compañero de clases con Emma caminando a su lado. De pronto mis sentidos se alarman. ¿Y si es ella? No, no puede ser. No me conoce de nada.

Suelto un suspiro cansado y me froto los ojos con frustración. Que no me conozca no quiere decir que no me haya visto con él. Y honestamente más de una vez estuvimos intercambiando palabras en un espacio público, así que no sería extraño que ella nos atrapara teniendo una conversación honesta.

Sea como sea, intento terminar mi almuerzo lo más rápido que puedo para evitar estar más tiempo allí y salgo de la cafetería con el estómago lleno. Agradezco que Matt no me regala miradas a escondidas y empiezo a caminar en dirección a mi habitación una vez más.

Para cuando llego Tara y Lara ya se encuentran allí y me quedo con ellas viendo una de nuestras series preferidas mientras hablamos de nuestro día. Tara pasa básicamente toda la tarde con Brandon cuando ambos salen de clases y Lara empezó a ir más seguido al gimnasio del campus porque hay un par de chicos que le parecen atractivos.

Por supuesto, cuando llega mi turno, intento ser lo más directa posible y evito irme por las ramas, de lo contrario tiendo a mentir o a disfrazar momentos o situaciones para no levantar sospechas. Por ejemplo, en cuanto se refiere a Nicholas, las dos piensan que la primer cita fue bien y que estamos conociéndonos de a poco sin ir más lejos. Y con respecto al "chico de las lecciones" me limito a contarles que ya no lo estoy viendo más y que no descarto la posibilidad de volver a verlo si las cosas con Nicholas no funcionan. Pero eso una de las mentiras más grandes porque no tengo intención de correr hacia Matt como una despechada. Primero porque ahora tiene novia. Y segundo, porque eso podría lastimar aún más mi pobre corazón.

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