"Todos tenemos nuestro intenso y privado apocalipsis", pero también tenemos el potencial de vivificar nuestro mundo. Aunque sea en tintas, podrás contruir ciudades y dejar tu firma en ellas.
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Querida amiga; sí, eso eres.
Después de tantos años odiandote y deseando que desaparezcas. Hoy me doy cuenta que siempre has estado ahí para mí, mientras todos se alejan, tú permaneces fiel a mí; mientras todos me mienten y usan, tú me dices las cosas como son; sin filtros ni asco.
Eres quien me pone los pies sobre la tierra, me recuerdas lo inservible que puedo llegar a ser, también me haces sentir inferior al resto y eso permite que mi humildad permanezca.
Querida amiga, te agradezco por enseñarme a ser fuerte ante la sociedad y derrumbarme en la madrugada cuando estamos tú y yo a solas...
Ya no deseo que te alejes, tú no eres una ilusión, eres tan verdadera como la propia vida. Eres una gran maestra, ya no le temo a la muerte, mucho menos a vivir.
Eres el motivo de vivir al máximo todos los días, para cuando llegue el momento de despedirnos, no sea un sentimiento de melancolía, sinó un "momento de tranquilidad".
Saber que en algún instante yo te soltaré la mano y me entregaré a mi amada, ya no me da pesar.
Querida amiga, gracias por existir y formar parte de mí.
EL BRILLO QUE HOY TENGO ES GRACIAS A TU OSCURIDAD.