La Magia Del Alfarero Antiguo

Capítulo 6

Harry empacó un par de artículos en una bolsa de lona, principalmente algunos libros y algunos elementos esenciales. Snape le había informado que su Padrino lo estaría esperando en la oficina de Dumbledore a las 9 am y que por favor se asegurara de que el hombre no se quedara en Hogwarts por mucho tiempo. Harry puso los ojos en blanco sabiendo cuánto se odiaban Sirius y Snape.

Le dio a Gargoyle la contraseña de inmediato esta vez, ya no estaba de humor para su descaro.

"¡Harry! ¡El gran cuarto campeón! ¿Has olvidado cómo enviar una lechuza después de convertirte en un campeón de los Tres Magos?" Preguntó Sirius cuando lo vio.

"Tú y mamá tampoco enviaron uno", dijo.

La cara de Sirius cayó, "supongo que las cosas son un poco complicadas".

Se giró hacia Dumbledore, quien lo miraba divertido, "gracias Albus por dejarnos usar tu red flu, Harry regresará alrededor de las 9 de la noche del martes".

Dumbledore asintió, "El Flú estará abierto para ti en ese momento, Harry".

"Vamos, Harry", dijo Sirius mientras arrojaba un poco de flú al fuego y gritaba: "¡Cuarto de Cornamenta!"

Harry se despidió del Director y siguió el ejemplo de Sirius. Terminó en el piso de su sala de estar sin haber aprendido nunca a viajar por Flú.

Sirius resopló, "eres peor que Tonks cuando sales del Flú", dijo.

"Bueno, si alguien mejorara el sistema Flú, podría aterrizar de manera segura algunas veces", respondió Harry.

"Tu madre nos está esperando en la cocina, acabemos con esto, ¿sí?" dijo Sirius, viéndose muy incómodo.

Harry malinterpretó esto como que Sirius le tenía miedo a su mamá, lo cual, para ser justos, sería una reacción perfectamente natural a la situación actual.

Harry entró en la cocina y encontró a su madre sentada y bebiendo un poco de té, con los ojos rojos e hinchados. "Harry", dijo mientras se levantaba y lo abrazaba, "mi bebé, siento mucho que te haya pasado esto".

"Está bien, mamá, podemos resolver esto", respondió bastante sorprendido de que su madre no comenzara a gritar tan pronto como entró en la habitación. Sirius se sentó en la mesa redonda que se usaba para las cenas familiares. Harry y Lily se sentaron frente a él.

"Harry, lamento mucho no haberte enviado una carta cuando me enteré. Una vez que me enteré del torneo, estaba preparando frenéticamente algunas cosas que pensé que no necesitarían preparación hasta el verano". dijo Lily.

Harry miró entre su madre y Sirius, "¿finalmente vas a decirme de qué se tratan estas lecciones?"

Notó que Sirius se ponía cada vez más incómodo y estaba muy confundido sobre lo que estaba pasando.

"Llegaremos allí en breve, ¿Albus te ha dado tu horario de entrenamiento?" preguntó Sirio.

"Dijo que lo recibiría el martes cuando regrese", respondió Harry.

Sirius asintió, "Bella y yo estaremos alternando los jueves por la noche para venir a ayudar con las sesiones de Mad Eyes".

Harry asintió, amaba a Sirius pero sabía que su tía Bella era la luchadora más talentosa y la consideraba incluso mejor que Ojo Loco. Estaba feliz de aprender de ella.

"¿Entonces estas lecciones son más entrenamiento para cuando regrese Voldemort? Moody dejó escapar que piensa que es pronto".

"No son exactamente lecciones, por supuesto aprenderás los secretos restantes de la magia de la familia Potter, así como la magia de la familia Black", dijo Lily.