Marcos y Antonela

8-Mejor amigo

CAPITULO 8

Mejor Amigo
Regresé a casa justo antes de las 12 am no me había dado cuenta de la hora pero si mi padre que al parecer estaba viendo una película en la sala cosa extraña porque nunca hace eso. Me dijo al percatarse de que llegué.

--- Recuerda desinfectarte las manos

--- Lo sé---Dije, justo antes de irme a mi habitación volvió a decir.

--- Me enteré que el nieto de la señora Emma volvió, creo que ustedes son muy cercanos o eso escuché de tu mamá.

--- Sara te contó?

---Asi es--- Afirmó.

---Marcos es mi mejor amigo--- Informé.

---Entonces son amigos... Creí que era otra cosa, aun así no es bueno que te juntes con él, no es un buen chico.

--- Por qué hablas mal de él papá?. Ni siquiera lo conoces.

--- Pero si es la verdad Antonela. Recuerdas que te hizo mentir cuando pidió permiso para supuestamente ir a estudiar pero en cambio te fuiste a otro lado---Dijo.

--- Yo elegí ir esa vez. No fue su culpa.

--- Que pasa si ahora te mete en cosas peores.

--- No deberías de pensar así de Marcos. Él no es una mala persona.

--- Basta de defenderlo. Y basta de juntarte con él. Que esa supuesta amistad no te va atraer nada bueno---Dijo.

Respiré hondo y sin decirle nada me alejé de ahí y me fui hasta mi habitación. Creí que no podría dormir por todo lo que papá dijo pero cuando me acosté enseguida me quedé dormida.
En la mañana siguiente me fui a trabajar en el jardín de la señora Emma a pesar de que ese día amanecí con la noticia de que Sara retomaría su puesto de jardinera. No le dije a la señora Emma que sería la última vez que trabajaría como jardinera porque jardinera o no aun así vendría a visitarla así es que nada cambiaría excepto que ya no cuidaría las plantas.
Marcos se dio cuenta de que estaba triste cuando vino junto a mi. Yo estaba sentada en el jardín después de regar. El se acercó y me preguntó.

--- Estas bien?

---- Sí, aunque no se-Dije dudosa

Me miró alzando las cejas.

--- Es que ya no seré la jardinera---Dije.

---- AAAH Que problema-Fingió asombro.

--- Siento que te estás burlando-Dije

--- Claro que no---Dijo.

--- Entonces te seguiré contando--- Continué.

---prosigue- Agregó.

--Cuidar las plantas es algo que me gusta hacer, siento que dan color a mi vida. Y produce en mi mucha tranquilidad... por eso lo extrañare.

--- Quizás ya no lo vas a cuidar, pero siempre podrás verlos--- Dijo.

--- Tienes razón.

--- Lo mismo pasa conmigo-Volvió a decir-- Podrás verme pero no podremos hablar así sentados juntos como lo hacemos ahora.

--- Te irás pronto? ---Pregunté

Asiente

---Pero todavía falta-- Respondió

--- Cuanto falt... (¿cuándo falta?) --- Dije a medias cuando me interrumpió un grito. Ambos volteamos la cabeza en dirección a la casa que al parecer provenía de ahí.
Entramos a la sala a toda prisa, asustados de que algo grave había pasado, pero nos encontramos a una chica parecida a la misma señorita que Julián estaba besando la otra vez, tenía el rostro asqueada intentando sacar saliva de sus sandalias. Mientras chiver lo miraba, ella parecía furiosa.