Un poco común triángulo amoroso ♡ vhopekook ❀ omegaverse

CAPÍTULOS DOS: PROYECTO

JungKook consideraba como un punto positivo el hecho de que sus padres decidieran alquilar aquel dormitorio para que comenzara a saber lo que sería independizarse y lo que sería sobrevivir por su propia cuenta, no solo por el hecho de que tuviera un lugar privado para poder existir sin quejas ni reclamos, mucho menos llamados de atención sobre alguna cosa de la que él no tenía el control (como su celo), sino porque también podía existir en soledad y calma, sin gritos de por medio o las críticas de otros.

Sin embargo, uno de los puntos negativos era que la ropa sucia no se lavaba mágicamente y de que si no salía a hacer mercado su nevera se mantendría vacía, así que fueron unos primeros días algo complicados, pero había logrado sobrellevarlo con ensayo y error.

Era un lugar sencillo y sólo tenía dos ambientes que se separaban por una pared, también había un pasillo en la entrada en donde había una puerta para el baño y parecía ser que no había nada más. La habitación era el estándar, ya que sólo universitarios alquilaban habitaciones en el edificio por la zona en la que estaban y realmente no tenían muchas opciones ni muchas necesidades por sus ocupaciones, así que por más vacío que se viera el lugar, JungKook era positivo. Después de todo, la casa de sus padres estaba casi a las afueras de la ciudad y la cercanía a la universidad le daba el beneficio de descansar un poco más.

Lo único malo del lugar en sí era que, al ser un edificio lleno de universitarios, algunas noches estuvieron cargadas de música estridente y ruidos molestos. Él no entendía cómo hacían fiestas tan ruidosas si las habitaciones eran tan pequeñas, pero hubo días en los que había deseado cortarse las orejas.

Así mismo, otra de las cosas que no le dejaban disfrutar plenamente de esa nueva vida, era que absolutamente todo salía del dinero de sus padres y la presión por encontrar un trabajo que lo hiciera desligarse por completo de ellos le estaba comenzando a molestar los hombros, así que por más aterrado que estuviera al respecto, sabía que tendría que enfrentarse a la vida laboral tarde o temprano.

Las mañanas eran decentes dentro de todo, así que luego de arreglarse simplemente bajaba las escaleras hasta la zona común que compartían los demás inquilinos del edificio antes de salir a la calle y hacer su camino hacia la universidad. A veces era acompañado por un par de personas, ya que el camino era el mismo, pero no había logrado hablar mucho con los demás y muchos ya tenían grupos para hablar y conversar durante el trayecto, por lo que disfrutaba de su soledad al son de alguna canción de su playlist resonando en sus audífonos.

Una de las cosas que a JungKook le gustaba era que aquella zona fuera bastante concurrida, por lo que las calles no se vaciaban en la noche. Eran cientos los locales y restaurantes que había alrededor, así como tiendas de ropa y un centro comercial no muy lejano, pero lo que más llamaba su atención era un local no tan grande pero visible, uno que lucía un letrero enorme que decía "Escuela de danza Sunshine" y por el color de los dibujos del cartel y la presencia del lugar, su atención caí ahí cada mañana, incluso su lobo se veía interesado, moviendo su cola con emoción y curiosidad.

JungKook entendía la reacción de su parte lobuna, ya que él siempre había sido fan de la danza, le gustaba la idea de interpretar sentimientos con los movimientos de su cuerpo y demás, pero aquello no era algo que lo llevaría lejos, sus padres habían sido claros al respecto. Además, él tenía cosas más importantes en las cuales pensar, como en encontrar la mejor manera de prestar atención a sus clases sin que el sueño lo atacara y en tratar de evitar el problema que era Kim TaeHyung apestando todo el salón de clases con el aroma de su pareja.

Lo único bueno de haberse dado cuenta de que el delicioso aroma que lo hipnotizaba era de un omega, fue que ya no se sentía asqueado ni confundido, es decir, no era posible que le gustara el aroma de un alfa y él estaba feliz de saber que no era un alfa defectuoso o algo por el estilo.